El reciente triunfo de La Libertad Avanza (LLA) en las elecciones legislativas de 2025 dejó en evidencia el desanclaje entre el discurso político tradicional y la realidad social. El analista político Lucas Paulinovich subraya que la contundencia de la victoria, inesperada incluso para el propio oficialismo, se explica por la desconexión de encuestadores, consultores y medios que se enfocan en generar "audiencias o hinchadas" en lugar de analizar la materia prima de los indicadores económicos y sociales. Según Paulinovich, la sorpresa es generalizada, pero el resultado alumbra un problema metodológico evidente en el discurso público.
Paulinovich minimiza el factor del apoyo de Estados Unidos, que si bien sostuvo la intuición de viabilidad económica, no fue decisivo para el resultado que logró LLA. El analista identifica dos factores clave en la elección: el descenso de la inflación, un hecho central para el estado de ánimo argentino, y una fuerte aversión al pasado. Además, sostiene que la idea de que "se vota con el bolsillo" subestima el componente de la libertad individual. Argumenta que existe un hartazgo popular respecto al tutelaje estatal, económico, político y cultural, siendo la cuarentena por COVID-19 un punto central para entender esta reacción.
Al evaluar el panorama en Santa Fe, el analista interpreta la derrota de Provincias Unidas como un "castigo de la polarización". Explica que los proyectos provinciales, aunque eficaces en su territorio, fracasan en construir el puente necesario hacia la representación nacional. La prudencia de las provincias no sedujo ante la opción de "dulce o amargo" de la polarización. Sobre el peronismo, considera que el kirchnerismo ganó la batalla cultural interna del PJ, pero no en la sociedad. Este espacio, que hoy opera bajo una lógica de conflictividades en lugar de la histórica armonización peronista, ha perdido prestigio y ascendente social, dejando a su propuesta lejos de ser competitiva.
La oportunidad histórica que se abre para el gobierno es un gran acuerdo nacional para aislar y "trosquizar" al kirchnerismo. No obstante, el desafío de La Libertad Avanza será evitar el "sobre giro" ideológico para enfocarse en la consolidación de un programa económico estable. Profundizar en las dinámicas de poder que configuran el nuevo mapa político argentino es indispensable para comprender el futuro.