Los padres de Nicolás C., presunto sicario que, según revelaron escuchas, le pedía ayuda a su madre porque no quería “matar a más gente”, fueron detenidos este domingo durante la visita a su hijo en la cárcel.

El hombre y la mujer están acusados de formar parte de la misma banda delictiva, vinculada al narcotráfico en el cordón industrial, a la que habría servido el joven con varios encargos de asesinatos.

Los padres acudieron a la sede de Drogas Peligrosas de la Policía Federal en Rosario, donde está detenido el joven, y quedaron arrestados ellos también, informaron fuentes oficiales.

A la pareja le secuestraron 70 mil pesos y 1.200 dólares en efectivo, además de tres teléfonos celulares. Serán indagados este lunes a las 7.30.

Los dos eran empleados municipales de la Comuna de Ricardone, donde fueron separados al conocerse que a la mujer era acusada de aconsejar a su hijo seguir en el negocio de la venta de drogas, cuando éste le confesó que había asesinado a un hombre por 30 mil pesos.

La conversación, que fue revelada por Rosario3 dos semanas atrás, desencadenó un escándalo político en esa localidad y un reclamo de vecinos para la salida de la por entonces funcionaria.

Por favor, ayudame. Hoy estoy tranquilo. Mañana me agarra la desesperación y no quiero matar a más gente. Me chupa la verga (sic) si tengo el teléfono pinchado. No me interesa más nada. No puede ser. El viernes fui a matar a uno por 30 mil pesos, mami”, le dice el presunto sicario, Nicolás C., quien está en prisión por integrar una banda que se dedica a la venta de estupefacientes en Fray Luis Beltrán, Ricardone, San Lorenzo, Capitán Bermúdez, Puerto Gaboto y Rosario.

Pero lejos de contener a su hijo, la mujer, que es empleada comunal del área de Desarrollo Social en Ricardone, le respondió: “Hacemos una pescadería de pantalla, boludo (sic). Vamos a embolsarla nosotros. Con vos pila hacemos cualquier cosa los dos, negro”.