Un joven que atacó a cuchillazos a su pareja y a su beba en la localidad bonaerense de Francisco Solano continúa prófugo, mientras que ambas víctimas siguen internadas recuperándose de las graves lesiones.
El ataque sucedió el pasado sábado cuando Agustín Ramos, de 24 años, agredió en un contexto de violencia de género a Kiara Maqueira, de 22, y a su hija, de 17 meses.
Ramos utilizó un cuchillo de cocina para agredir a su pareja, a quien le provocó cortes en el labio y en el rostro, mientras que, en medio de la disputa, también resultó herida la hija de la pareja, con un corte en la mejilla izquierda.
Mónica, la mamá de Kiara Maqueira, recordó en diálogo con Telenoche (El Trece) la noche en la que su hija y su nieta fueron atacadas en su casa. “Nos fuimos a dormir y de repente, escuché ruidos en la habitación de al lado. Pensé que era mi nietita, que había tenido fiebre los días anteriores”, relató.
“Me encontré con el monstruo arriba de mi hija, agarrándola del cuello con una mano y con la otra, dándole puñaladas por todos lados. Me tiré encima de él porque vi a la nena ensangrentada. A mi hija también. Todo fue muy rápido”.
En medio del caos, la mujer empezó a gritar para pedir ayuda. “Él logró soltar a Kiara, gracias a Dios. Pero me pegó una piña en el pómulo y ahí mi hija pudo agarrar a la nena”, recordó.
Su esposo entró a la habitación justo cuando el agresor la golpeó. “Caí hacia atrás entre los muebles, rompí todo. Tengo el pómulo quebrado en tres partes, me tengo que operar y poner una prótesis”, contó la mujer, todavía conmovida. “Pero a pesar de todo, esa piña hizo que soltara a mi hija y no la matara”, siguió.
La nena, hija del agresor, también resultó herida. “La nena tiene un tajo de siete puntos de un lado y dos del otro”, aseguró. Según ella, nunca antes había visto un episodio de violencia semejante: “Es la primera vez que esta persona ataca a mi hija de esta manera. Jamás la vi marcada, nunca supe si le pegaba. Sí, escuché discusiones, pero nada más”.
Después del ataque, las dos mujeres quedaron internadas dos días. “Le pregunté a mi hija si había habido una discusión esa noche y me juró que no. Me dijo que estaban viendo una película y a los 10 minutos él se le subió encima, la empezó a ahorcar y a pegarle piñas en la cara. Después agarró el cuchillo y la empezó a cortar por todos lados”, relató.
“No sabía si mi hija podía morirse desangrada. No entendía nada. Solo quería que salga de mi casa para poder atender a mi hija y a mi nieta”, remarcó.
Familiares, amigos, vecinos y cercanos a la víctima informaron que Ramos sigue en el barrio, por lo que piden su inmediata detención.
A través de sus redes sociales, Maqueira comenzó a publicar diversas imágenes sobre cómo fue el ataque, cómo quedó la vivienda tras la agresión y la situación actual en el hospital.
“Estábamos los tres acostados mirando una película. De repente, sin ningún motivo, él se subió arriba mío. Me empezó a ahorcar, me pegó piñas en la cara y agarró un cuchillo que estaba en la mesa de luz. Me tiró apuñaladas en la cara. En ese momento, mi bebé de 1 año y 5 meses se acercó y él le rozó la carita con el cuchillo, cortándola. A mi hija le hicieron 7 puntos en la cara. A mí, 2 puntos en la boca. No sé cómo seguimos vivas”.
“La Policía lo está buscando, tiene orden de detención, pero todavía no aparece. Mientras él está libre, yo no puedo dormir, no puedo respirar tranquila, no puedo vivir sabiendo que el hombre que quiso matarme está suelto. Necesito que la Justicia actúe. Necesito que lo encuentren”, concluyó.