Un mendocino de 32 años sospechado de haber cometido delitos contra la propiedad en localidades del sur de Santa Fe quedó detenido en la Alcaidía de Casilda, luego de que el juez Darío Pangrazi le dictara prisión preventiva por un escruche cometido en Sanford junto con cómplices que permanecen prófugos. Se espera que en los próximos días también rinda cuentas por una estafa en Bombal y una entradera en Carcarañá.
Alan Nicolás Gabriel Pérez nació en Guaymallén y, en teoría, reside en General Roca, Río Negro, aunque también hay registros de él en la ciudad de Neuquén, según informaron fuentes policiales y judiciales.
Cayó el mediodía del pasado 2 de octubre tras una persecución por un camino rural de Chabás, donde perdió el control de un VW Gol Trend blanco radicado en la localidad bonaerense de Alejandro Korn y con patente cambiada. Con serias lesiones, terminó internado en el Hospital San Carlos de Casilda bajo custodia policial.
El lunes, el fiscal de Casilda Juan Pablo Oggero acusó a Pérez de haber integrado una banda de escruchantes que, el 1º de octubre a las 22.30, llegó a un domicilio de Juan de Aloisio al 200, en Sanford, y se apoderó de una mochila, un reloj Casio, un medallón de oro y cincuenta mil pesos.
En medio de la faena, los delincuentes fueron sorprendidos por los propietarios de la vivienda y escaparon, asistidos por el conductor del Gol que los esperaba en los alrededores.
El vehículo fue identificado por cámaras de seguridad y, al día siguiente, la policía local lo reconoció, dando inicio a la persecución que culminó con Pérez detenido. El Gol tenía las patentes cambiadas “a fin de ocultar su utilización en hechos contra la propiedad en las localidades de Sanford, Melincué y Carcarañá”, dijo el fiscal Oggero.
Por lo pronto, Pérez quedó detenido con prisión preventiva por tres meses, y no se descarta que sea objeto de nuevas imputaciones a solicitud de la Fiscalía de Melincué y de Cañada de Gómez.