Desde la Universidad Oberta de Catalunya (UOC), advierten en un nuevo estudio que existen dos fenómenos que surgen cuando se hacen maratones de series. Los mismos se denominan "memoria de pez" y "efecto túnel", con consecuencias cognitivas y culturales.

La memoria de pez (memoria saturada)

Este fenómeno alude a no recordar nada cuando se comienza una nueva temporada de una serie. Esto se produce por el "consumo en maratón" o el ver varios capítulos en un corto lapso de tiempo. Desde el estudio explicaron que “ver muchos capítulos de golpe influye sobre dos procesos básicos sobre los que se construyen nuestros recuerdos”. Se trata de:

-Los procesos de codificación de la memoria del cerebro: Afecta al poder almacenar la información y poder acceder a ella más tarde.

-El proceso de enlazar la nueva información con lo que ya está presente en la memoria, ya que “comentar la serie, reflexionar sobre ella mientras se espera la siguiente entrega, leer artículos… Todas estas actividades contribuyen a cimentar la memoria a largo plazo sobre bases más sólidas porque las conexiones entre esos estímulos recién recibidos y el backup de tu cerebro son más fuertes”.

Este olvido no es casual: “No es que tengamos mala memoria, sino que estamos saturando el cerebro con demasiada información, sin darle tiempo a procesarla bien”. En tal sentido, para que algo se quede en la memoria a largo plazo "necesitamos prestarle atención, entenderlo, relacionarlo con otras cosas de nuestra vida y vincularlo con aspectos emocionales".

Efecto túnel: cuando el algoritmo piensa por uno mismo

Este otro fenómeno alude a consumir siempre el mismo tipo de contenido a pesar de contar con un gran catálogo para elegir. Esto se debe al algoritmo de las plataformas. “La personalización algorítmica no deja de ser un filtro que hace predicciones sobre lo que cree que va a gustar”, sostienen los expertos.

En tal sentido, el cerebro sigue la tendencia de repetir patrones que ya han funcionado:“Buscamos ver cosas que nos gusten, y qué mejor manera que cosas parecidas a las que nos han gustado”. Los algoritmos refuerzan este efecto al ofrecer títulos similares a los que ya gustaron, lo que activa la dopamina (asociada al placer y a la motivación) y centra la atención solo en lo familiar. 

Todo ello genera esta especie de “visión de túnel, donde solo vemos una parte del catálogo, la que el algoritmo nos sugiere, pero también la que más encaja con nuestros gustos”.

Según los investigadores, existen dos tipos de atención:

-La dirigida por los algoritmos (bottom-up):  Al buscar contenido, algo "resalta" por encima de lo demás, ya sea porque se ha visto esa serie promocionada o porque el título o el cartel puedan gustar, y es entonces cuando se elige verla.

-La voluntaria (top-down): Requiere esfuerzo y se activa cuando uno decide buscar algo nuevo, explorar el catálogo y comparar opciones.

Consecuencias de ver siempre lo mismo y cómo elegir mejor

Ver contenido similar puede limitar la plasticidad cerebral. “Si todo lo que vemos es predecible, la adaptación a nuevos retos y aprendizajes se reduce”, explicaron. Sin embargo, consumir series fuera de la zona de confort, “permite activar regiones frontales relacionadas con el pensamiento crítico, el aprendizaje de nuevas informaciones, e incluso potenciar nuestra reserva cognitiva”.

La competencia entre plataformas ha multiplicado la oferta, pero no ha mejorado las decisiones de consumo. Estas aplicaciones saben que el mejor usuario es el que consume mucho contenido, lo que hace más difícil captar la atención, por ello diseñan sus catálogos para "engancharlo".

Finalmente, si bien la calidad de contenido no disminuyó, hay mayor "proliferación de series de tramas menos complejas", según detallaron.

Por todo ello, los expertos resaltan que es necesario recuperar el control. "Espaciar el tiempo frente a la pantalla, elegir con criterio, salirse de las recomendaciones automáticas y comentar lo visto enriquece la experiencia y protege la salud cognitiva", concluyeron.

Fuente: EFE.