Si bien, por un lado, se habla de “cortes cuidados”, “long bob” y puntas pulidas; la moda también amplía su abanico de posibilidades y sorprende con otros extremos. Este año, entre pasarelas, alfombras rojas y perfiles de celebridades, las extensiones XL comenzaron a hacerse notar cada vez con más presencia en pos de dar como resultado melenas que rozan la cintura y que agregan un plus de glamour instantáneo.
Extensiones XL
Algunas figuras de la industria musical y del entretenimiento ya se mostraron con este estilo y, como siempre, encendieron la llama del deseo capilar colectivo. La tendencia convive con el boom del “hair care”, pero lo redefine. Es decir, ahora, además de cuidarlo, se busca que el pelo tenga presencia, movimiento y un largo dramático que acompañe el look completo.
Las extensiones dejaron de ser sinónimo de cambios extremos y pasaron a convertirse en un aliado estético estratégico. Se usan para sumar densidad en los largos, emparejar cortes en transición o crear peinados de impacto sin esperar años para que el cabello crezca. Desde microcápsulas casi imperceptibles hasta cortinas y clips ultra naturales, hay opciones para todos los estilos y presupuestos.
Claro que no todo es cuestión de impacto visual. Los especialistas recomiendan mantenimiento adecuado, productos nutritivos y visitas periódicas a la peluquería para asegurar que el cabello natural no sufra.