París vive su semana de la moda por excelencia. Del 22 al 25 de enero la Alta Costura se sube a la pasarela en la ciudad de la luz y todo el mundo de la moda gira en torno a los diseños de las grandes casas del lujo. Celebs y fashionistas se darán cita en el front row para descubrir las propuestas Haute Couture para la próxima primavera-verano 2018.
La Semana de la Alta Costura de París es siempre un referente en todo el mundo por su calidad y derroche de estilo en lo que a moda se refiere. La Alta Costura parisina funciona como un perfecto entramado de grandes agujas, las mejores y más conocidas casas de moda, unas modelos escogidas con gran refinamiento y las directoras de las revistas de moda más importantes.
El evento tiene lugar dos veces al año, coincidiendo con el inicio de cada temporada, y para poder participar en él es necesario el cumplimiento de unas rigurosas normas que hacen posible su funcionamiento.
Te mostramos un resumen con todos los desfiles y las nuevas colecciones de la Semana de la Alta Costura de París:
Schiaparelli
Schiaparelli ha sido la firma encargada de abrir el evento. El diseñador Bertrand Guyon presentó una colección de Alta Costura Primavera-Verano 2018 en la que se vieron vestidos de ensueño en los que se incorporaron materiales muy alejados de la Alta Costura como tiras engarzadas entre la seda procedentes de bolsas de plástico de la compra. El reciclado no es nuevo en la Alta Costura, pero se están generalizando, es una constante que aparece en muchísimas colecciones.
Tampoco faltaron creaciones en formado “minidress” repletos de flecos o de plumas y vestidos con grandes manchas de color que celebran la vanguardia de la alta costura.
Christian Dior, binomio bicolor
En la colección primavera/verano 2018 de la casa francesa, Maria Grazi apostó fuerte por el blanco y negro. La mayor parte de las prendas se basaban en este binomio aunque se atisbaba una pizca de color en alguno de los diseños de corte asimétrico. La directora creativa de Dior ha seguido la línea de la casa con faldas con vuelo y cinturas marcadas haciendo una reinterpretación del maestro de la aguja adaptándolo al estilo moderno con ese toque “chic punk” que tiene la casa en la actualidad. Todo ello ambientado en una clara referencia a las exposiciones Surrealistas de los años 30 en la capital francesa.
Vemos dos tipos de vestidos, los compuestos por tejidos estructurados y estampados geométricos o psicodélicos; y otros con materiales fluidos en los que no falta el tul en forma de volantes y las transparencias. Como es habitual en Chiuri, la referencia al tarot y la astronomía no podía faltar: estampados y bordados impregnan vestidos y se encuentran en pequeños detalles de los diseños como las solapas de las chaquetas.
Con máscaras, los ojos muy marcados y el cabello pulido vimos los diseños de una colección en la que se respira magia.
Tony Ward
El diseñador italo-libanes presenta una vez más una colección en donde la feminidad es la esencia de los vestidos que basculan entre el dorado, el rosa y el azul noche. Tampoco faltan propuestas en blanco, negro o gris plateado. Todo un universo de volúmenes que van desde el corte princesa, al evasé, pero también las siluetas lápiz pegadas al cuerpo tienen cabida en esta propuesta veraniega.
Chanel o el gran jardín del “tweed”
El tweed, el tejido más emblemático de la firma francesa no faltó en los diseños de la colección de primavera/verano de la semana de la Alta Costura de París. Lagerfeld, el rey de los desfiles majestuosos, transformó el Grand Palais en un impresionante jardín.
En la parte inicial del desfile vimos un claro homenaje a Coco con las míticas chaquetas del tejido de la casa y faldas “midi” en tonos que iban desde los crudos a los violeta pero siempre dentro de la gama cromática de los colores pastel. Los abrigos, con volúmenes y formas texturizadas, modernizan una de las siluetas clásicas de la firma.
Las referencias a las flores, uno de los elementos clave de Chanel, y la naturaleza no faltaron, las vemos no sólo en el decorado, también en las prendas, con corolas en los hombros de las chaquetas y los volúmenes de las faldas y vestidos. También hubo lugar para los sofisticados complementos, con tocados de rejilla combinados con botas planas a la altura del empeine, también de tweed, que configuraban los “total looks” de la casa en los que se respira un espíritu elegante y juvenil.
Geoges Hobeika
El libanés Georges Hobeika recuperó la estética medieval en su colección primavera-verano 2018, a partir de tiaras, capas y vestidos mágicos con bordados de hilos metalizados y pedrería. La paleta cromática de la colección gira en torno a los tonos verde agua y azul cielo, que se funden con beis y dorados.
Uno de los looks más arriesgados fue un pantalón, en jacquard, combinado con un top que reproducía la melena de un león. La noche es para los vestidos de corte más clásico, con escote asimétrico y aperturas infinitas en las faldas.
Ralph & Russo
La colección primavera-verano de 2018 que Ralph & Russo presentó mantiene el objetivo de reflejar la diversidad femenina, sin dejar impregnarse de la cultura oriental en la que educó la directora de la firma, Tamara Ralph.
La seda es uno de los materiales presentes en la colección en rojo, verde ácido y el amarillo canario para vestir a una mujer exótica. No faltan los vestidos con tul y con pedrería de cristal.
El blanco, sin embargo, es el color protagonista en un gran número de creaciones, además de las gamas pasteles el rosa o el azul cielo. Asimismo vemos una gran diversidad de siluetas: lápiz, princesa, largo pero también mini dresses con mezclas de texturas.
Iris Van Herpen
La holandesa Iris Van Herpen subió a la pasarela una colección para la próxima primavera-verano 2018 titulada “Juegos de la Naturaleza” en la que el juego de volúmenes cobra un significado muy especial. Minivestidos, faldas largas y túnicas cobran vida a través del movimiento de las piezas, hojas de tul impresas en 3D a través de una colaboración con la Universidad Tecnológica de Delft, y pegadas sobre el tejido. Verdes aguas, amarillos a azules se mezclan con tonos nude y negros para crear una colección en la que nada desentona.
En la Semana de la Alta Costura de París se llevan a la realidad los sueños más especiales y bonitos del diseño. Tejidos maravillosos, confección artesanal, elección del lugar del desfile, un trabajo laborioso que recrea un mundo de magia y ensueño.