Newell's encontró un gol agónico y de otro partido para volver al triunfo

Newell's desató este domingo un gran festejo que tenía contenido en las anteriores seis fechas, cambio de DT mediante, con el triunfo agónico que consiguió en el Coloso ante Independiente, por 1-0 y con un gol en el minuto 48 del segundo tiempo y un jugador menos.

Román Bravo, uno de los pibes que hacía su debut, embocó un zapatazo tras un rechazo en un centro de Maximiliano Rodríguez –que volvió y fue ovacionado– para hacer explotar al estadio cuando ya parecía otro empate en este magro torneo.

Con varios juveniles, al Rojinegro le costó mucho el primer tiempo. Tanto la salida en defensa, con errores que le dieron chances a la visita –en apenas 5 minutos se pudo poner arriba pero falló Silvio Romero y luego el arquero Ramiro Macagno desactivó un par más–, como cuando pudo acercarse al área rival, donde no tenía ideas más allá de algún remate.

Sin goles, el momento más emotivo de la primera mitad fue al minuto 10, cuando el juego se interrumpió y todo el estadio, tanto en la tribunas como en la cancha, le rindió homenaje con un cerrado aplauso a Diego Maradona, que el sábado hubiera cumplido 61 años. Fue uno de varios recordatorios que organizó Newell's en la tarde.

El arranque del segundo tiempo se dio muy similar, con Independiente imponiendo su presencia ante un equipo juvenil que seguía fallando con la pelota desde su propio campo. Nicolás Castro no tenía su mejor tarde e Ignacio Scocco debía bajar para intentar armar desde atrás.

Pero promediando el complemento se mostró mejor Newell's, acaso con su rival cansado, y tomó más el balón, si bien seguía sin coordinación ni sorpresa arriba.

Esa condición de recuperación en el partido se vio amenazada con la tarjeta roja a Marco Campagnaro, otro de los chicos que hacía su estreno en primera y que por dos faltas bruscas recibió la doble amarilla.

Pero el ánimo rojinegro se refrescó rápidamente con el ingreso, entre otros cambios, de Maxi Rodríguez, su mayor emblema, que llevaba tres semanas sin jugar y con su estampa contagió a sus compañeros.

Cuando el encuentro, cada vez más chato, se terminaba, tuvo una el Rojo, con un centro y un peligroso cabezazo de Gastón Togni de sobrepique que pudo controlar Macagno. Pero también le iba a quedar una a Newell's. Y la aprovechó.

Maxi cobró una falta varios metros afuera del área, metió el centro, rechazó la defensa y Bravo, sin dejarla picar, la agarró con todo el pie para dejar sin respuesta a Sebastián Sosa y desatar acaso el mayor festejo de 2021 para la Lepra.