Después de confirmar que se quedará en Barcelona, Lionel Messi se unirá este lunes por la tarde (mediodía argentino) a los entrenamientos de pretemporada den la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí. Mientras tanto, para matizar la espera, el club presentó la tercera equipación con un sello distintivo: será de color rosa.
"En Barcelona el día se aclara, el sol comienza a despuntar y la ciudad adquiere diferentes tonalidades: el rosa de la mañana y el verde azulado del mar nos anticipan un paisaje luminoso, vibrante, mediterráneo, que es el que inspira la tercera equipación del FC Barcelona para la temporada 2020/21", explica el club en sus redes sociales.
Además, señala que la base rosa representar la ligereza del tejido y la libertad de movimientos, mientras que los detalles verdes remiten a la buena transpiración así como la absorción del sudor y la sensación de frescor. Dato importante: para su confección se utiliza material reciclado conseguido a partir de botellas de plástico.
Es la segunda vez en la historia que el Barça elige el rosa como color para su camiseta. La anterior fue en la temporada 2017 - 2018 y también como tercera equipación.
Este lunes se producirá el hecho más esperado por los hinchas culés: después de pasar las pruebas médicas y realizar el test PCR de coronavirus en su domicilio, Messi se incorporará a los entrenamientos bajo las órdenes del flamante DT neerlandés, Ronald Koeman.
El entrenamiento será a puertas cerradas, pero existe una gran expectativa en torno a la reaparición del capitán argentino, a quien los hinchas tiene previsto recibir con muestras de apoyo a las puertas de la Ciudad Deportiva.
Después de lo que pareció ser un cortocircuito inicial, a partir de ahora Messi y Koeman tendrán tres semanas para conocerse, ganar confianza, y cambiar conjuntamente el clima de conflicto en el que el Barcelona inició la pretemporada antes de comenzar la competencia.
El Barcelona de Koeman disputará dos amistosos, el Nàstic y el Girona, los días 12 y 16 de septiembre, en los que se volverá a ver a Messi en el terreno de juego vistiendo otra vez de blaugrana, algo impensable hace apenas unos días.
