Este miércoles el Real Madrid venció 3-1 al Manchester City en el estadio Santiago Bernabéu, luego de ir perdiendo durante casi todo el partido, dio vuelta la serie y avanzó a una nueva final de la Champions League. Se medirá contra el Liverpool el próximo 28 de mayo en París.
En un partido intenso y lleno de emociones, el equipo Merengue sacó otra vez su mística copera cuando parecía que los ingleses tenían la clasificación en el bolsillo. En los 90 minutos reglamentarios, el cero recién se quebró en el segundo tiempo: el alemán Gundogan condujo un contragolpe a la perfección y Mahrez, con un zurdazo al ángulo, puso en ventaja 1-0 al equipo de Pep Guardiola.
A un minuto del final, Rodrygo anotó el empate y le dio suspenso al cierre del juego. Con la igualdad, el City seguía pasando por el resultado global (ganó 4-3 la ida en Manchester). Pero dos minutos más tarde, el delantero brasileño volvió a convertir y le dio vida al equipo español, que forzó el alargue con el 2-1.
La hazaña del conjunto dirigido por Carlo Ancelotti era posible y se hizo realidad en el tiempo extra, cuando Karim Benzema puso 3-1 al Merengue con un tanto de penal y empezó a sepultar los sueños ingleses de llegar a la final.
El Madrid, máximo ganador de la Champions con trece títulos, se impuso con la jerarquía de sus figuras, pero también con la historia. Y cuando el City, ya sin Kevin De Bruyne ni Gabriel Jesus en cancha, intentó recuperarse, Courtois se hizo gigante. El belga privó al City del segundo con una tapada exigida ante el cabezazo del inglés Phil Foden en el primer tiempo suplementario.
La gran final de la Champions League se jugará el 28 de mayo en el Stade de France, de Saint Dennis, en Francia
