Consumo aquí y ahora: rosarinos aplican estrategias para perder menos contra la inflación

Frente a la escalda de precios y la dificultad de ahorrar, los consumidores prefieren gastar algún dinero sobrante del mes en compras de placer y salidas 

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Frente a una inflación que acumula un 46% de incremento en lo que va del 2022, pocos salarios llegan a sobreponerse a la escalada de precios que se da mes a mes y que solo en julio registró una suba del 7,4%, la cifra más alta en 20 años según el Indec. Ya sea porque las posibilidades de ahorro se ven cada vez más limitadas o por las trabas para adquirir moneda extranjera, son muchos los rosarinos que aplican la lógica de consumir aquí y ahora.

Según analistas, se trata de un consumo rápido donde el presente se impone sobre los proyectos a largo plazo que requieren un ahorro anticipado. La plata, en estos casos, prefiere destinarse a salidas con amigos o parejas a comer afuera o en compras de placer como puede ser la adquisición de una nueva prenda de indumentaria, electrónica o hasta un kilo de helado para disfrutar una noche en compañía de una serie. 

"Hicimos un informe con mi consultora y comprobamos que la gente hoy en día elige darse gustos. Después de una semana dura de trabajo, quien tiene un peso de sobra lo gasta en algún momento de placer, funciona como una especie de reconocimiento al esfuerzo laboral, como un autoregalo. Es un consumidor que no piensa tanto en el precio, vale $1700 el kilo de helado, lo pago", indicó Carlos Ortego, director de Competencia Consultores.

A su vez, el analista citó un trabajo elaborado por Guillermo Oliveto, especialista en consumo, quien señala que los consumidores que tienen alguna suma de cierta importancia en pesos prefieren destinarla en comprar algún bien durable, como un electrodoméstico, que en adquirir u$s 200 en el mercado paralelo. "Ahorrar u$s 200 para muchos no implica nada y es una opción más atractiva volcarse hacia la compra de un objeto al que se la va a dar uso", consideró.

A su vez, Ortego hizo referencia a un estudio de su consultora que pone en evidencia la caída de ingresos promedio de las familias argentinas en el último tiempo y como, cada vez, los salarios quedan más desfasados con respecto a la moneda estadounidense. En este contexto, ahorrar se vuelve cada vez más complejo y es por esto que, según Ortego, las personas eligen volcar cualquier peso extra en una compra o distracción del momento.

La realidad es que frente a una inflación tan pronunciada, para muchos rosarinos quedarse con pesos es dejar que el dinero se eche a perder día a día. En este sentido, también aparece una necesidad del consumidor de comprar rápido el objeto que se quiere por miedo a que este incremente considerablemente su valor de una semana o de un mes al otro, como ha venido sucediendo en distintos rubros.

También se hace presente las ansias de algunas personas por stockearse de mercadería, sobre todo en supermercados. En este sentido, Sergio López, referente de la Cámara de Autoservicios y Supermercados de Rosario (CASAR), indicó que todas las semanas hay algún cambio en las listas de precios, de entre el 5% y el 7% según el rubro. "Aquellos que tienen algún margen aprovechan y compran alimentos que hoy tienen un nivel de aumento muy grande y son productos de primera necesidad", indicó el referente.

Julio impactó en el bolsillo ¿y agosto?

No solo julio registró la inflación más alta en un mes para la Argentina desde hacía mucho tiempo, sino que otros indicadores también se dispararon frente a la salida de Guzmán del Ministerio de Economía y por la incertidumbre que reinó en torno a la situación financiera del país, entre otros factores.

A tono con este clima político y económico, el informe del Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella sobre el Índice de Confianza del Consumidor mostró que este se derrumbó en julio 11,1% respecto del mes previo, tras haber registrado un aumento de la confianza del 7,7% durante junio.


 

“Esto muestra una volatilidad poco usual en este indicador y muy relacionado con las diferentes opiniones por regiones. En la suba del mes anterior, las regiones de Capital y Gran Buenos Aires habían liderado el incremento, y ahora la caída es liderada por el Interior, que cayó 15,4% respecto a junio", señalaron desde la Universidad.

El IPC Meli, es decir el indicador que mide los precios de diferentes productos que se comercializan a través de la plataforma Mercado Libre, se disparó fuertemente en julio y arrojó una suba promedio del 28%, muy por encima del 7,4% que midió el Indec y sumamente superior a las cifras que venían registrándose en los meses anteriores.

Sin embargo, para agosto, el indicador exhibe que las empresas eligieron mantener los valores y casi no realizar aumentos luego de los fuertes incrementos del mes anterior. A su vez, López indicó que a diferencia de julio, donde las subas en alimentos llegaron a los dos dígitos, los aumentos volvieron a moderarse llegado el octavo mes de año aunque aclarando que en las listas que entregan los proveedores siempre hay remarcación de precios.

En lo que es inflación, si bien todavía faltan algunos días para conocer el dato oficial, consultoras que relevaron precios en la primera quincena hablan de que esta promediaría el 6%, una cifra más baja que la de su antecesor pero que sigue manteniéndose en niveles altos.

Pese a un escenario que parece jugar en contra, Ortego consideró que en las personas todavía quedaron muy presentes algunos "dolores de la pandemia" y restricciones que se vivieron en las épocas de cuarentena dura, por lo que existe una tendencia a enfocarse en vivir el presente sin pensar tanto en invertir a futuro.

"Quedan secuelas y la gente dice 'ahora yo me voy a dar el gusto de cosas que no pude hacer durante la pandemia' y es que la angustia va a durar un tiempo más y estamos en lo que ciertos académicos acuñaron como 'la sociedad líquida' que se concentra en vivir el hoy", sostuvo Ortego.

La tarjeta de débito le gana al efectivo en los súpers

Durante el primer cuatrimestre del 2022 (último dato disponible), los residentes argentinos
compraron un 4% más de cantidades en el super con respecto al mismo período de 2021. La variación a precios corrientes fue del 61%. (un 3% se compró de manera online), según revela un estudio realizado por la analista y contadora pública, Melisa Murialdo.

Mientras las compras a través de tarjetas de crédito y otros medios de pago como vales se mantienen en un 36% y un 5% del total, respectivamente; las realizadas por medio de tarjeta de débito pasaron de un 27% a un 29% y las pagadas en efectivo disminuyeron en igual proporción, remarcando una clara tendencia a la sustitución paulatina del billete por el plástico.

"Como se vislumbra, los aumentos constantes en los productos, sumado a que muchas veces los sueldos de los ciudadanos no se equiparan con la inflación, no afectan a sus compras en el super: el consumo en supermercados no para su crecimiento tanto en las nuevas plataformas, como en los locales físicos, de manera presencial. Es un sector de la economía, de primera necesidad y que a pesar de cada inconveniente que se viva en el país, siempre será rentable", consideró Murialdo.

Sin embargo, la forma de pago más elegida por los argentinos para sus consumos en el
supermercado continúa siendo la tarjeta de crédito. Para Murialdo, se puede pensar que está íntimamente relacionado con los planes del Gobierno Nacional para el fomento del consumo en el país, como lo son el Ahora 6, 12, 18 y 30.

"Es una de las alternativas que los consumidores eligen como la mejor manera de equiparar o ganar a la inflación. A su vez, durante las épocas de fiestas, de acuerdo al Bureau de Crédito Equifax y el Banco Central de la República Argentina (BCRA) los argentinos habrían comenzado a buscar préstamos personales como alternativa de financiamiento", señaló la especialista.

A su vez, mientras durante 2017, 2018 y 2019; las compras online de mercadería en súpers minorista significaban menos del 1,5%; a partir del 2020 representan más del 3% del total, tendencia que se mantiene en el primer cuatrimestre del 2022.

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