La pandemia convirtió al 2020 en el año del boom del e-commerce, y así como mucha gente descubrió los beneficios de comprar online, otros conocieron los dolores de cabeza que pueden derivar las estafas online, demoras o incumplimientos. Este rubro explica buena parte del notable crecimiento del 40% de las denuncias recibidas por la Oficina de Defensa al Consumidor de Rosario.

“Todos los años los reclamos crecen un 20%, pero aunque todavía no contamos con datos precisos, estimamos que el incremento en 2020 fue de un 40%”, manifestó María Julia Bonifacio, titular del organismo, y agregó que a raíz de la pandemia, fortalecieron el contacto con los consumidores a través de las redes sociales como Facebook, Instagram y Twitter.

“A través de todos los medios recibimos un promedio de 20 consultas diarias vinculadas al área financiera, contra tres o cuatro de telefonía y una o dos de servicios públicos”, enumeró en diálogo con Ecos365. Personas que conocen a un supuesto vendedor por redes, transfieren el importe de un producto que nunca les llega es lo más habitual. En ese caso, se recomienda examinar antes al vendedor, ver qué tiempo tiene en la red, los seguidores con los que cuenta y las opiniones y calificaciones de clientes, como para tener más certezas de que se trata de un perfil real. Con el inicio de la temporada estival, también hubo estafas en el alquiler de inmuebles.

En otras ocasiones, los reclamos son por demoras excesivas en el envío de los productos o artículos que llegan dañados o son diferentes a los requeridos. Más allá de lo referido a las compras online, destacó que la semana en la que se dio a conocer el decreto impidiendo desalojos de inquilinos, crecieron exponencialmente las consultas al respecto y el tema se convirtió en el número uno.

“Hubo mucha gente que quedó atrapada en la pandemia, y teniendo que reintegrar el departamento, a otros los agarró con dos contratos, o en plena mudanza. Fueron muchas las situaciones confusas que se dieron y la gente tenía que analizar si le convenía quedarse y pagar el aumento en cuotas, dependiendo de su situación personal”, sostuvo.

Algo similar ocurrió con las tarifa de servicios públicos, cuyo congelamiento se fue prorrogando, pero en el medio aparecían ajustes que después se terminaban reintegrando si el Gobierno no autorizaba la suba. En los últimos días se multiplicaron las quejas por subas sobre todo en internet y cable. Bonifacio aconsejó primero revisar si al cliente no le venció alguna promoción, que en muchos casos representa hasta el 50% del valor total.

En este sentido, manifestó que en muchas ocasiones con llamar a la empresa y solicitar una nueva promoción, es posible conseguir algunos meses de gracia. De cualquier modo, hay que saber que algún retoque en la tarifa habrá. “El congelamiento de precios venció el 31 de diciembre, y seguramente después de un año, las subas serán importantes, pero deben ser autorizadas por el Gobierno”, aclaró.

Por último, un tip que dio Bonifacio, y que muchos desconocen, es qué ocurre con aquellos comercios que venden ropa y no tienen habilitados los probadores por cuestiones sanitarias. “En caso de que la quieras cambiar y no te entre, generalmente tenés que volver y te dan a cambio una nota de crédito para adquirir otro producto. Pero el cliente puede reclamar la devolución del dinero porque debido al contexto, se considera que opera como una compra online, donde internacionalmente existe el reintegro”, resaltó. Es cuestión de que cada consumidor haga valer sus derechos.