De esta manera propone ser “un espacio de escucha y diálogo” sobre “las iniciativas que pone en marcha” el organismo, para “avanzar en la promoción y el ejercicio del derecho a la participación ciudadana”.

Los consejeros serán elegidos teniendo en cuenta “una distribución federal”, y en el cuerpo tiene representación “la diversidad de géneros, los pueblos originarios, los adolescentes con discapacidad, los que viven sin cuidados parentales, los que están alojados o son egresados de dispositivos penales y aquellos pertenecientes a centros de estudiantes y organizaciones sociales”.

“Este espacio permitirá que las chicas y los chicos puedan opinar e incidir en los diversos momentos de gestión de las políticas públicas que les atañen, siguiendo los preceptos de la Convención sobre los Derechos del Niño y la Niña y la Ley 26.061” de Protección Integral, señaló Gabriel Lerner, secretario nacional de Niñez, Adolescencia y Familia.

La iniciativa formaliza el compromiso asumido por el secretario nacional, en un encuentro federal con adolescentes realizado el 21 de octubre.

“El Consejo Consultivo de Adolescentes de la Senaf viene a institucionalizar un espacio de participación, consulta, diálogo y de incidencia en las políticas para chicos y chicas”, apuntó Mariana Melgarejo, directora nacional de Sistemas de Protección.

“Este Consejo va a representar la voz de muchos adolescentes, por eso estará formado por representantes de todas las provincias, con características y condiciones diversas”, agregó.

La funcionaria sostuvo que la apuesta es porque los adolescentes “puedan apropiarse de este Consejo Consultivo para incidir en las políticas de niñez, y que esto influya en otros temas que les interesen o les preocupen, posicionando y visibilizando una agenda de temas propios que son de su interés”.

La Resolución 1916/2020, publicada en el Boletín Oficial, establece que el Consejo Consultivo de Adolescentes funcionará bajo la órbita de la Dirección Nacional de Sistemas de Protección de la Senaf y estará integrado por treinta y dos adolescentes, de entre 13 a 17 años cuyo mandato durará un año.

El Consejo tendrá la responsabilidad de ser representante y portavoz de las inquietudes, intereses, demandas y acciones de adolescentes de todas las jurisdicciones del país.

También podrá realizar sugerencias en materia de políticas públicas, programas y acciones relativos a las infancias y adolescencias, entre otras de sus funciones.