En lo que va de la semana, cuatro estaciones de servicio fueron atacadas a balazos en Rosario y la región. Por el momento, no hay certezas de los motivos por los que se están dando estas balaceras, pero desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) no descartan que sea con el objetivo de generar “intimidación pública”.
“En ninguno de los casos hubo pedidos de dinero a cambio, lo que sería normal, y que configura un delito de extorsión en el Código Penal. Más bien se trata de otra forma delictiva que tiene que ver con la intimidación pública con tratar de demostrar cierto poderío”, explicó en A Diario (Radio 2), la responsable de la unidad de Balaceras, Valeria Haurigot.
De acuerdo a la fiscal, por el momento es la línea de investigación más fuerte que se trabaja en el MPA ya que está descartado que haya sido producto de una interna sindical o empresarial.
Con respecto a las medidas que vienen llevando adelante, Haurigot sostuvo que se reforzó el trabajo sobre causas investigativas relacionadas al uso de teléfonos celulares dentro de unidades penitenciarias y no descartó que el autor intelectual de estos ataques esté relacionado a Los Monos.
“Nosotros promovemos investigaciones creativas para dar, no solo con los autores materiales, sino que también con los ideólogos. Esto nos llevó a que, por conocimientos previos y por cruzar investigación, reforcemos esas causas. Si logramos un dato que abone a que se trata de personas privadas de su libertad, analizaremos diferentes peticiones a los jueces”, indicó.
