Médicos, enfermeros y choferes de ambulancia realizaron este miércoles algo más que una manifestación por malas condiciones laborales y bajos salarios: mostraron esa precariedad que pone en riesgo a los trabajadores y a los pacientes atendidos.
Las causas pueden ser muchas y complejas de explicar pero la crisis en el sector de emergencia de salud, justo en medio del rebrote de coronavirus y la prolongación de la pandemia, es fácil de entender en un puñado de imágenes decadentes.
Los trabajadores del Sies expusieron en De 12 a 14 (El Tres) las unidades en mal estado, con volantes o tableros encintados para que no se desarmen, neumáticos lisos, sin aire acondicionado ni ventilación que obliga a trasladar a pacientes con 40 grados en el interior del vehículo.
A eso se suman la rotura o faltante de equipos. El caso llamativo fue el uso de cartones como férulas para inmovilizar a personas quebradas o fisuradas.
“Son las que tenemos a mano. Es discutible su uso. Las férulas rígidas que pasan de un paciente a otro no son recomdanbles porque pasan gérmenes pero tampoco usar un cartón”, explicó el chofer y delegado gremial de ATE, Daniel Albachiaro.
El delegado señaló una unidad marca Peugeot que “no tienen ventilación y no tiene aire acondicionado, el paciente viaja acá atrás con un médico que lo asiste a una temperatura de 40 grados y eso empeora la salud del paciente, que se descompensa”:
Albachiaro recalcó que lo más grave es la “situación mecánica de los móviles” y enumeró la existencia de ambulancias con “el tren delantero que se mueve para un lado y otro” o con las cubiertas lisas, una fragilidad límite en medio de una urgencia.
“Hay paramédicos y choferes que hace seis meses que no cobran. Y otros precarizados que suben a los móviles que no están en condiciones porque si no lo hacen temen perder su trabajo”, agregó.
La denuncia fue realizada en el marco de la manifestación en San Luis y Balcarce, con corte de calle y en marco de una jornada provincial de lucha de 48 horas de ATE y Siprus con guardias mínimas y atención de pacientes covid.
“El sistema de emergencia en la provincia es un desastre: neumáticos rotos, puertas bloqueadas, insumos limitados, infraestructura dañada: motores y demás”, describió Jerónimo Ainsuain, secretario gremial de Siprus Rosario.
El dirgente de los profesionales de la salud aseguró que el gobierno provincial no invierte en las unidades y “privatiza el sistema de emergencia”. “En lugar de arreglar los móviles están tercerizando con contratos millonarios la atención”, dijo.
Ainsuain fue categórico: “La infraestructura no está en condiciones de dar una atención de calidad a los pacientes”. También reclamo un lugar de descanso para el personal de guardia, aumento salarial acorde a la inflación y el pago de un adicional que no se cumple.
