Un hombre que huye tras un robo queda atrapado en una ciénaga. A medida que su desesperación avanza, cincelada por el miedo a la muerte, la espesura verde de la selva y el delirio provocado por el pavor lo consumen. Su nombre es Carlos. Está preso en un hoyo barro y anhela un rescate. Mientras espera, lo visitan sus recuerdos, sus fantasmas.
El párrafo de arriba es una breve descripción –algo más que un prólogo– de la obra Hombre enterrado que estrena en Rosario este viernes en el teatro del Centro Cultural Parque de España (Sarmiento y el río).
La pieza de Carlos Masinger dirigida por Paula Manaker está ambientada en Sudamérica, en la época colonial. Sin embargo, aclaran, “le puede pasar a cualquiera”.
Lo que se vivencia en la obra es la desesperación, la muerte”
“Hombre enterrado no es un personaje decisivo en la política de ningún momento en particular, sino que se narra una situación que puede ocurrir en el siglo XIX o en cualquier parte y a cualquiera. Lo que se vivencia en la obra es la desesperación, la muerte”, señala Carlos Masinger a Rosario3 sobre la pieza surgida a partir de un cuento de su autoría.
“Hay algo de la puesta en escena y en el planteo plástico y visual de la obra que tiene que ver con generar una distancia, como un artilugio –indica Paula Manaker–. Me parece que los temas que tocamos son bastante actuales en el sentido de que hay una sensación de incomodidad que se podría extrapolar a cualquier situación histórica. A veces, ubicarla en un momento y lugar nos permite poder hablar de algo con un poco más de soltura”.
Fuimos construyendo una historia en la que se cuestionan roles y lugares respecto a quién expecta y cómo"
Ambos advierten que la transposición contempla al público. En tal sentido, buscan que “el teatro sea un lugar en el que las personas se vean representadas en cualquiera de los personajes y que entren y salgan de ese desfile constantemente, ya sea por simpatía o aberración”.
La puesta en escena a la que apela Manaker ofrece un universo imaginario y mítico en el que convergen diversos lenguajes: teatro, danza, audiovisuales y artes plásticas. En la construcción de ese universo, autor y directora trabajaron con el artista francés Ange Potier y con la artista paraguaya Ediltrudis Noguera.
—¿Cómo surgió Hombre enterrado?
Carlos Masinger: Me interesaba trabajar la hospitalidad entendida como la acción de negar el auxilio o la ayuda a otra persona, o cerrarle la puerta a quien la necesita.
Paula Manaker: Eso está en la obra tanto como la cuestión cultural y política que emplaza al cuento. También fuimos construyendo una historia en la que, de algún modo, se cuestionan roles y lugares respecto a quién expecta y cómo.
CS: La obra está ambientada en el siglo XIX pero es posible establecer una analogía con el presente. Reitero esto porque en el primer ensayo que hicimos con público invitado no teníamos los vestuarios. Entonces, en una escena final en donde aparecen una cantidad de personajes, bueno, funcionaba de la misma manera.
Un proceso colectivo
Hombre enterrado estrena en Rosario con cinco funciones en el CCPE, pero ya tuvo su puesta ante el público en Asunción (Paraguay), ciudad a la que ya habían viajado autory directora para la presentación de la obra un Dios que se va. Allí tomaron contacto con la ceramista Ediltrudis Noguera quien confeccionó una suerte de “instalación final” de la pieza que refleja “el vínculo entre ambos países y da una idea de continuidad de la historia”.
El proceso de construcción y montaje comenzaron el último diciembre a partir de residencias de creación que dieron forma a la transposición del cuento original.
La selva funciona en el relato como bastidor, como sostén de la idea de una naturaleza devoradora y algo monstruosa"
El elenco está integrado por Federico Tomé, Marcelo Diaz, Yanina Silva, María Cecilia Mastria y Mauro Lemaire.
“La escenografía es de madera y tiene un trabajo muy artesanal. Está pintada por Ange y creada por Carlos. La situación escénica se completa con animaciones que nos permiten entrar un poco en el pensamiento y el delirio de ese hombre atrapado y también le dan cierta vitalidad a la espesura selvática”, abunda Manaker al tiempo que advierte que se trata de “una obra fuera de género”.
Para la directora, la selva "funciona en el relato como bastidor, como sostén de la idea de una naturaleza devoradora y algo monstruosa que está planteada en términos de tamaño, de relación entre el hombre y el medio".
Hombre enterrado ofrece cinco funciones en el teatro del CCPE. El estreno es este viernes a las 20.30 y las presentaciones continuarán este sábado, el viernes 12, sábado 13 y domingo 14 de agosto a la misma hora.
Las entradas pueden adquirirse en la boletería del espacio cultural de martes a sábado, de 15 a 19, y a través del sistema 1000tickets.com.ar.
Ficha artística
Dirección y producción general: Paula Manaker
Elenco: Federico Tomé, Marcelo Diaz, Yanina Silva, María Cecilia Mastria y Mauro Lemaire
Arte y animación y escenografía: Ange Potier
Cerámica: Ediltrudis Noguera
Construcción escenográfica: Carlos Masinger
Vestuario y FX: Ramiro Sorrequieta
Diseño lumínico: Diego López
Autor y música original: Carlos Masinger
Coproducción del Centro Cultural Parque de España (Rosario, Argentina) y el Centro Cultural de España Juan de Salazar (Asunción, Paraguay)
