Robbie Williams sospecha que el deterioro de su visión podría estar ligado al uso de medicamentos inyectables para bajar de peso. El cantante viene utilizando estas inyecciones desde hace varios años para controlar su peso, pero reconoce que uno de los posibles efectos secundarios sería una leve visión borrosa.
“Quiero advertir a la gente que lea esto de los riesgos potenciales, para que se asegure de investigar”, le dijo al diario británico The Sun. Y sumó: “Fui un consumidor bastante precoz de las inyecciones, pero lo que también estoy notando es que mi vista no es muy buena”.
Comentó que, en sus shows, le cuesta identificar a ciertas personas del público y que, hace poco, estuvo en un partido de fútbol donde los jugadores se le veían como “manchas en un campo verde”.
Un estudio de 2024, realizado con 17.000 pacientes durante seis años, encontró que quienes recibieron semaglutida —comercializada en versiones inyectables para adelgazar como Ozempic y Wegovy— tenían una probabilidad siete veces mayor de desarrollar una afección ocular poco común pero grave, que puede generar pérdida de visión en un ojo.
De todos modos, el trabajo no logró comprobar que la semaglutida fuera la causa directa del problema y aclaró que la cantidad de personas afectadas era reducida.
Williams había contado en 2023 que su descenso reciente de peso se debía a estas inyecciones, y que se trataba de una necesidad médica por sus antecedentes de depresión. “Nena, estoy tomando Ozempic”, le dijo a The Times, y agregó: “Bueno, algo como Ozempic. Es como un milagro de Navidad”.
También bromeó: “Me han diagnosticado de autodesprecio tipo 2”, para luego profundizar: “Es terriblemente catastrófico para mi salud mental aumentar de peso. Mi voz interior es intolerante y cruel frente a la gordura. Es enloquecedor”.
