Un violento hecho de inseguridad dejó aterrados a los abuelos y abuelas del geriátrico El Sol, ubicado en la zona de Fisherton, en el que dos delincuentes armados con cuchillos ingresaron durante la noche del lunes y se llevaron diferentes pertenencias. Una cuidadora resultó herida en el brazo durante el episodio.
El equipo de Telenoche (El Tres) fue hasta el lugar y habló con Andrea, encargada del hogar de ancianos que se encuentra en Wilde al 600 bis, quien contó que todo comenzó alrededor de las 23.30, cuando allí se encontraba trabajando la cuidadora del turno nocturno.
"Ella estaba en el comedor y aparecieron dos hombres con cuchillos, que aparentemente ingresaron por la puerta de atrás desde el patio", relató la mujer. Según lo que le comentaron los abuelos del geriátrico, uno de los delincuentes "era jovencito", de alrededor de 17 años, mientras que el otro podría tener unos 25.
Andrea contó que los ladrones estaban buscando celulares y televisores, que recorrieron todo el hogar y le pedían pertenencias a los residentes con una actitud muy violenta y a través de amenazas. Incluso a la cuidadora que estaba de turno la hirieron en el brazo y tuvo que recibir 10 puntos.
Además, agregó que en abril ya habían intentado entrar a robar en el geriátrico, pero en aquella ocasión se salvaron gracias a que sonó la alarma, cosa que no ocurrió esta vez.
Inés, una abuela que vive en El Sol, dijo que los "malandras" entraron cuando ella estaba acostada en su habitación junto a otra mujer, quien tiene colocado un yeso. "Me dijeron que les dé todo", contó y agregó que les entregó dos bolsos y que dentro de uno de ellos estaba su celular.
Además de manifestar que los dos delincuentes "se llevaron de todo", Inés hizo hincapié en las amenazas que recibieron todas las víctimas y aseguró que a ella le dijeron: "A vos te voy a hacer pedacitos".
En tanto, describió la escena apuntando que "había sangre por todos lados" como consecuencia de la herida cortante que sufrió la nochera. También dijo que si bien se encuentra mejor, sigue con miedo por lo ocurrido, y que el robo le generó mucha bronca por el "sacrificio de locos" que hacen todas los trabajadoras del geriátrico.
Otra de las cuidadoras del lugar se acercó luego del robo a partir de un llamado de la encargada, y ayudó a atender y tranquilizar a todos los abuelos que estaban "muy nerviosos".
