Thomas Craig Lewis, un británico de 35 años, fue sentenciado ese martes a 10 meses de prisión por grabar a escondidas en situaciones íntimas a su hijastra Lauren Brightwood cuando todavía era menor de edad. Además, el Tribunal de la Corona de Northampton, Reino Unido, impuso 100 horas de obras públicas para el condenado.

Lewis grabó durante años a su hijastra desnuda con una cámara puesta sobre la puerta del baño, mientras ella se duchaba sin sospechar nada. Sin embargo, el delincuente fue descubierto en noviembre de 2018 cuando la víctima se percató de que estaba siendo filmada.

El padrastro, que se casó con la madre de Brightwood cuando Lauren tenía 4 años, intentó excusarse, al inventar que se preocupaba por su hijastra ya que estaba llorando.

Por otro lado, RT informa que Lewis admitió haber grabado a Brightwood "un par de veces" y luego reconoció su culpabilidad, al señalar a la Policía que contaba con hasta 10 grabaciones de contenido íntimo.

La víctima sufre de ansiedad y depresión asi también como desorden alimenticio. Además la joven afirmó que desde entonces empezó a tomar alcohol más de lo que debería.

Sin embargo, Brightwood trata de hacer frente a esta experiencia y recurrió a las redes sociales para compartir su historia y concienciar a la población, de modo que otras posibles víctimas también se atrevan a denunciar.

"Una de las cosas que necesitaba para obtener apoyo, justicia y un sentido de cierre era una voz, contar mi historia, y eso es lo que quiero dar a los demás", reza la víctima en su perfil en Instagram.