La habitación del bebé es el espacio con el que comenzará su nueva vida. Y por lo tanto, la creación y organización de los cuartos debe estar pensada y planificada para conseguir el mejor lugar para los pequeños.

Los cuartos para bebé no tienen que limitarse a lo ya conocido. Las últimas tendencias apuestan y proporcionan un lugar no sólo para los niños, sino también para sus padres. Estos son algunos tips para lograr la mejor decoración en la habitación del bebé:

 

Espacio y muebles

 

Para empezar, hay que tener muy en cuenta el espacio del que se dispone y pensar en el futuro, ya que el moisés que albergará al recién llegado en los primeros meses probablemente ocupe la mitad de lugar de la cuna. Entonces, en la elección del resto del mobiliario es fundamental respetar las dimensiones. Las cunas funcionales que luego se transforman en camas son una buena elección, ya que pueden ser utilizadas desde alrededor del cuarto mes hasta la infancia tardía.

 

Entre los muebles multiuso que podrán permanecer y modificarse a medida que el niño crece, se encuentran una estantería y un baúl, una cajonera y hasta una mesa, que puede cambiar de soporte para el cambiador a pequeño escritorio o a mesa de noche.

 

Colores y texturas alegres

 

Estimular los sentidos del bebé es una de las cuestiones más importantes al decidir qué tipo de ornamentación se va a emplear. Colores y texturas ayudarán a que el lugar sea alegre y a que el niño aprecie distintas sensaciones. Para ello, una de las opciones es pintar las paredes de colores luminosos o con motivos diferentes. Murales, láminas o una guarda con dibujos son algunas de las variantes que se pueden elegir. Las telas también son elementos decorativos. Motivos escoceses, con flores o con animalitos alegran la habitación y colaboran en la tarea de estimulación.

 

El piso también puede convertirse en un elemento atractivo. Por ejemplo, puede pintarse de colores, con dibujos esparcidos o simular un tablero. Una alfombra es también una posibilidad para evitar el contacto directo con el piso. Aunque si es de rafia o esterilla, puede resultar áspera para los pequeños que gatean.

 

Iluminación

 

La luz es otro de los aspectos para tener en cuenta. Además de la luz natural, una buena opción es poner un interruptor con iluminación variable que permita, por ejemplo, dejar una luz mínima para controlar al bebé por las noches o arroparlo. Un móvil colgado de la lámpara también es otro incentivo visual que favorece la curiosidad del niño.

 

Juguetes y consejos de seguridad

 

Los juguetes cumplen un papel importante. Un centro de actividad colgado en una de las paredes de la cuna, además de un toque de color, le dará una gran oportunidad de estimulación al bebé. En este caso, hay que sacarlo por las noches, para no distraer al bebé, y por motivos de seguridad. Lo mismo sucede con un móvil.

 

Cuando se eligen los juguetes que formarán parte del entorno del bebé, es necesario tener en cuenta ciertas normas de seguridad. Por ejemplo, un simple peluche que tenga una etiqueta mal cosida puede ser un elemento riesgoso, lo mismo que juguetes que contengan partes móviles que el bebé pueda ingerir.

 

¡Manos a la obra!