La provincia de Córdoba busca, en forma completa, conquistar al turismo en la época estival. Distintos paisajes y actividades de todo tipo se entremezclan para saciar gustos varios, ofreciendo diversas opciones.
En total, Córdoba ofrece 170.000 plazas formales de alojamiento con gran variedad de precios y comodidades.
Valles de Córdoba
- Punilla:
Dividiendo la provincia en valles, el de Punilla se posiciona como el corredor turístico más solicitado, por la popularidad de la reconocida Villa Carlos Paz, ciudad que ya se ubica como una de las principales plazas de teatro en el país y que este verano tendrá a más de 20 obras en escena.
Además, se encuentran otros icónicos atractivos como el Reloj Cu-cu, la Aerosilla, vela en el Lago San Roque, excursiones y cabalgatas, entre las principales ofertas.
Por otra parte, el Festival Nacional de Folklore de Cosquín tendrá lugar entre el 22 y 30 de enero, así como el Cosquín Rock hará lo propio durante las jornadas del 12 y 13 de febrero en Santa María de Punilla.
La Cumbre, Villa Giardino, Tanti, La Falda, Icho Cruz y Los Cocos, son otras reconocidas localidades para visitar y disfrutar a nivel geográfico y gastronómico. Entre las actividades más recurrentes, el montañismo, trekking y excursiones son algunas de las opciones para recorrer los distintos lagos, ríos y arroyos, con posibilidad de acampar.
- Calamuchita:
Se ubica al sur de la provincia y Villa General Belgrano es uno de los destinos más convocantes del mismo. Su comunidad de identidad centroeuropea con sus celebraciones y gastronomía clásica, son grandes atractivos de la localidad. Cervezas artesanales, bodegas de vinos, chocolate y té, son las opciones más típicas.
Para los amantes de la naturaleza, el valle se encuentra atravesado por ríos, cascadas y senderos en donde se pueden realizar múltiples actividades. Otros sitios a visitar son el Dique Los Molinos, Santa Rosa de Calamuchita, Los Molinos, La Cumbrecita, Embalse, Yacanto, Río Tercero y Los Molinos.
- Ansenuza:
Desde hace unos años, Mar Chiquita/Miramar se convirtió en otro de los puntos turísticos más buscados de la provincia, al noreste de la misma. La localidad cuenta con esta particular laguna homónima que, además de tener 6.000 kilómetros de extensión, es de agua salada y se constituye como uno de los humedales salinos más grandes de Latinoamérica y el mundo.
Más de 250 especies de aves viven allí, en un ecosistema con variada y abundante flora autóctona.
- Paravachasca:
Distinguido por reunir naturaleza y cultura, este valle cuenta con un paisaje serrano ideal para realizar actividades al aire libre, siendo las cabalgatas, caminatas, excursiones guiadas y bicicleta las más elegidas.
Además, la región cuenta con el Parque Quebrada del Condorito, el único Parque Nacional de Córdoba que cuenta con una población de más de 70 cóndores andinos.
- Sierras Chicas:
Con una gran variedad en infraestructura hotelera, gastronómica y de entretenimiento, este valle se destaca por las localidades de La Calera, Villa Allende -al pie del cerro Pan de Azúcar-, Unquillo, Río Ceballos, Salsipuedes, El Manzano y Agua de Oro.
Por otra parte, Colonia Caroya, reconocida por sus embutidos, comparte tradición con Jesús María, de gran renombre por su emblemático Festival de Doma y Folklore.
Existen distintos paisajes para visitar, como la Reserva Hídrica Natural Parque de La Quebrada (Río Ceballos) con su embalse.
- Traslasierra:
Ubicado al oeste de la ciudad capital, el valle está delimitado por distintos cordones serranos. Se accede por la Ruta Nacional N°20, por el Camino de las Altas Cumbres.
Ríos y arroyos se distinguen por la claridad de sus aguas, que desembocan en el Embalse La Viña. El mismo posee un muro de contención de 102 metros, el más alto de Latinoamérica. Distintos deportes náuticos se practican allí como kayak, windsurf, canotaje y remo.
En verano, los ríos Mina Clavero y Panaholma son los más visitados a raíz de sus balnearios y paradores. El valle cuenta con 20 localidades turísticas, destacándose Villa Dolores, Mina Clavero, Nono, Cura Brochero, Las Tapias, La Paz, Los Hornillos, Villa de las Rosas y Las Rabonas.
Además, la región cuenta con la posibilidad de ecoturismo, en donde se disfrutan los paisajes agrestes y rocosos junto a las áreas naturales protegidas más importantes de la provincia: Parque Nacional Quebrada del Condorito (otro ingreso), Reserva Hídrica Pampa de Achala y Reserva Natural Chancaní.
Más actividades:
Existen además rutas gastronómicas (con quesos, salames, asados a la cruz, cabritos); turismo religioso (con la Manzana Jesuítica y seis estancias distribuidas en Colonia Caroya, Jesús María, Santa Catalina, Alta Gracia, La Candelaria y San Ignacio); y turismo histórico (con el Camino Real al Alto Perú, que fue la principal vía de comunicación y comercio entre los virreinatos del Río de La Plata y del Perú).
