El diputado nacional santafesino de La Libertad Avanza, Nicolás Mayoraz, está convencido que están “los acuerdos necesarios para avanzar en la discusión en particular de los diferentes artículos” de la ley Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos (Ómnibus) y “sacarla rápido”, entre miércoles o jueves de esta semana que comienza. Cree que habrá una “fórmula para compensar el reclamo de los gobernadores” por la coparticipación del Impuesto País y que ello no va a trabar la media sanción. Y más allá de que “es otro partido” el tratamiento posterior en el Senado, entiende que “habrá acompañamiento de los senadores” quienes están “abiertos al diálogo”.
Mayoraz es el presidente de la estratégica comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados que integró el plenario de comisiones que le dio tratamiento al proyecto de ley original del Ejecutivo. Si bien fueron los emisarios del gobierno quienes negociaron los cambios con la oposición dialoguista, el legislador rosarino fue testigo de los avances.
La ley Ómnibus se aprobó en general por 144 votos a favor y 109 en contra y el tratamiento de los capítulos en particular seguirá el próximo martes desde las 14. Tras la votación del viernes pasado, el diputado libertario habló mano a mano con Rosario3:
-¿Qué evaluación hace después de la votación en general de la ley Ómnibus?
-Estamos muy conformes, incluso con el tono del diálogo con los distintos bloques y alcanzamos un número (144 votos a favor y 109 en contra) que nos deja tranquilos. Tenemos los acuerdos necesarios para avanzar en la discusión en particular de los diferentes artículos. Y estamos muy entusiasmados en sacarla rápido en el recinto la semana que viene.
-¿Qué significa sacar rápido? La semana pasada también tenían el consenso y tardaron tres días en aprobarlo.
-Son muchos artículos, si se discute cada uno de ellos pueden pasar días o semanas. No obstante, ya hay consenso mayoritario tal como está presentado el dictamen. Eso permite votar por paquete de artículos o por capítulos, sin darle lectura ni discusión. La mayoría de los artículos tiene consenso mayoritario y solo algunos requerirán una discusión abierta.
-¿Cuándo creen que podrán terminar de darle la media sanción definitiva?
-Si llevamos buen ritmo, entre el miércoles o jueves próximos a más tardar.
-¿No podrían haber continuado sesionando durante el fin de semana?
-No. Por un lado había cuestiones del articulado para terminar de darle forma. Y por otro lado, había que aflojar un poco más las tensiones y evitar mayores problemas. Incluso varios diputados querían volver a sus provincias para continuar su tarea legislativa en la región de origen y volver el martes.
Los puntos claves
-¿Obtuvieron lo que esperaban o sacaron la aprobación posible?
-El bloque central de la ley tenía que ver con la declaración de las emergencias y la delegación de facultades, más otras cuestiones que debían ser resueltas en simultáneo. El gobierno plantea un ajuste pero necesita herramientas y por eso el paquete fiscal. Como lo dijo (el ministro de Economía) Luis Caputo el viernes anterior, el gobierno se encontró con que las variables macroeconómicas estaban mejor y por eso se quitaba la presión o urgencia con resolverlo de manera urgente. Ese paquete (fiscal) se discutirá en general. Incluso, hay capítulos que no tienen que ver con la emergencia y la crisis, sino en realidad con la necesidad de liberar ciertas actividades y se pueda volver a reactivar la economía y la inversión privada.
-¿Se incluirá finalmente la coparticipación del Impuesto País como solicitan algunos gobernadores?
-El gobierno quiere que se termine de aplicar ese impuesto el 31 de diciembre de 2024 como así también el modo de distribución. Si lo coparticipás es muy difícil sacarlo luego. El Impuesto al Cheque es un ejemplo, se lo creó para un año coparticipándolo con las provincias y ya vivimos hace 10 años con el mismo impuesto. Además, el Impuesto País es muy distorsivo para las inversiones de capital y hay que tratar de sacarlo. La cuestión ahora pasa por encontrar una compensación para las provincias por las pérdidas o ingresos que se dejaron de percibir cuando se derogó la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias. El punto es encontrar la solución en otra ley o paquete fiscal que conforme a los gobernadores para que tengan los ingresos necesarios.
-¿No hay riesgo que se trabe la votación por ello?
-Para nada. Puede haber una fórmula que se pueda proponer para satisfacer el reclamo de algunos gobernadores. Se trata de sólo dos artículos, que se pueden sacar y no se traten.
-¿Cómo se resolvió la cuestión acerca de los biocombustibles teniendo en cuenta las críticas del sector por el impacto en la provincia de Santa Fe?
-La reforma plantea la necesidad de modificar un sistema oscuro y discrecional que en Santa Fe beneficia a una actividad que hay que promover y fortalecer. Con el dictamen y las posibles modificaciones se pueden responder y satisfacer las necesidades de distintos sectores y de alguna manera también a los santafesinos protegiendo y liberando la competencia en forma gradual para que no sean afectados por las agroexportadoras. El objetivo de la ley es que haya competencia y mejorar los precios. Y además garantizando el aumento del corte de bioetanol de manera paulatina poniéndolo en el texto de la ley. Con el texto acordado creemos que deja conforme a todos, permite una apertura gradual, no deja desprotegidos a los que ya están en actividad, y protegen la fuentes de trabajo.
-¿Cómo quedará la cuestión de la cuestión jubilatoria y la necesidad de recomponer los ingresos a ese sector?
-El gobierno advirtió la pérdida del poder adquisitivo del jubilado que es del 43 por ciento con la actual fórmula y trató de mitigarla con ayudas extraordinarias. Por eso, el presidente Javier Milei propuso modificarla y el Congreso no lo vio así. El gobierno entiende que se necesitan más tiempo y herramientas fiscales para mejorar la situación de los jubilados. Al sacar el paquete fiscal (de la ley Bases) no están garantizados los recursos. Junto al paquete fiscal hay que encontrar una nueva fórmula sustentable en el tiempo y que mejore el ingreso de los jubilados.
Políticas e incidentes
-¿Qué lectura hace de los acuerdos políticos que llegó el oficialismo para poner tener la aprobación en general de la ley?
-Hay un bloque de Unión por la Patria que no está tan unido, hay tres legisladores que hicieron bloque propio y en breve aparecerán otros haciéndolo porque no todos apoyan al kirchnerismo y será importante en la dinámica futura. Tuvimos el acompañamiento de partidos provinciales, del PRO y de buena parte de la UCR. Estoy conforme con la dinámica de trabajo y del presidente de la Cámara. Porque mejorar la ley es para mejorar la vida de los argentinos.
-¿La próxima semana pueden agravarse los incidentes fuera del Congreso como sucedieron en los tres primeros días?
-Es que tenemos una izquierda irresponsable que busca el conflicto, que haya estas situaciones y otras peores y más dramáticas. Lo hicieron el viernes y van a intentar hacerlo. Claramente hay una intención de provocar disturbios contra la ministra (Patricia) Bullrich y el protocolo de actuación. El Congreso dio una señal importante y clara, incluso lo dijo el diputado (Miguel) Pichetto y está en la Constitución: no se puede interrumpir el funcionamiento de uno de los tres poderes de Estado. Se aprendió de la experiencia de 2017 cuando se discutía la reforma jubilatoria y por los disturbios se suspendió el tratamiento de la ley. No vamos a permitir que se interrumpa el funcionamiento del Parlamento como lo hizo el kirchnerismo al intentar que se caiga la sesión. Hay sectores que van a ir a provocar, son quienes no ganaron las elecciones y quieren hacerlo en la calle y provocando incidentes. Tampoco son trabajadores porque un trabajador no puede estar 48 horas en una plaza sin ir a trabajar.
-Después de la media sanción en Diputados llegará el tratamiento de la ley en el Senado, ¿cómo cree que les irá?
-Habrá un acompañamiento en el Senado para con la ley. Es que la sociedad lo está siguiendo con atención como ocurrió en 2008 con la 125 (proyecto de ley para las retenciones móviles agropecuarias y que desató el conflicto con el campo) y está apoyando a Milei que necesita herramientas para gobernar. Hay un grado de apoyo mayoritario para que salga y los senadores lo acompañarán. Lamentablemente hay una oposición kirchnerista con cero autocrítica que desconoce la crisis que nos han dejado y no quiere dotar al gobierno de esas herramientas. No obstante, hay sectores del peronismo de las provincias que empiezan a abrir el diálogo para la búsqueda de soluciones porque en un país federal las provincias no se salvan solas.
-¿Es otro partido que se juega en el Senado?
-Es otro partido y por suerte no me toca jugar a mí.
La agenda del aborto
-Sus dichos sobre derogar ley de interrupción del embarazo generaron revuelo, ¿está en agenda para este año?
-No es un tema que está en la agenda inmediata del gobierno ahora, pero forma parte de la plataforma. Si la ley se plantea, me entusiasma y haremos el trabajo necesario para juntar los votos. Estamos mucho mejor que hace dos años, la renovación del Congreso ha incorporado votos celestes aunque no hay poroteo de votos ni mucho menos. La voluntad está, hay alineamiento con Milei, solo hay que darse una estrategia parlamentaria.
-¿Cree que realmente es un tema de la agenda de la sociedad?
-Mucha gente pensaba que el aborto iba a solucionar problemas y no iba a ser tan grave. Hay unos 80 mil abortos quirúrgicos por año, es un número terrible y se empieza a ver en el enfriamiento del crecimiento demográfico y traerá problemas a futuro. El principal problema es moral y es el asesinato de un ser humano. Es una cuestión de defensa de la vida humana, el Código Penal tiene una función moralizante de un pueblo y están contenido lo que no hay que hacer. Si dejás afuera esa conducta, entonces está bien hacerlo. Encima no sólo avanza en la despenalización ya que lo eleva a la categoría de derecho y nace la obligación del Estado de atenderlo. El aborto debe dejar de ser una opción.
