La Comisión Nacional de Valores (CNV) consideró como "inadmisible" que la defaulteada agencia de Bolsa local Guardati Torti (GYT), que supo ser top ten y hoy acumula denuncias de sus clientes por estafa, vuelva a operar en el mercado de capitales, como pidió recientemente a la Justicia a través de una medida cautelar.

Y no sólo eso: el ente de control alertó que dejarla volver a operar iría en contra de "la transparencia del mercado y la protección del ahorrista". Y esa postura crítica de la CNV, significa un fuerte espaldarazo para la imputación por estafa y administración fraudulenta que impulsó el fiscal Sebastián Narvaja contra el directorio de GYT.

GYT, que operaba tanto en mercados de granos como de títulos de valores, cayó en un millonario default en febrero de 2020 empujada por la crisis de Vicentín, pero venía arrastrando serios problemas financieros desde hace años.

Tras su impago fue inmediatamente suspendida para operar por Matba-Rofex, el Mercado Argentino de Valores (Mav), Byma, la Bolsa de Rosario y la propia CNV. Sin capacidad de respuesta financiera, la empresa fue a convocatoria de acreedores.

Pero además, ahorristas que invertían en el mercado de capitales a través de ellos denunciaron que les habían sacado los saldos líquidos de sus cuentas y empezaron a denunciar penalmente a GyT, que ya acumula más de 50 denuncias.

Fue ahí que la CNV también presentó una denuncia penal contra todo el directorio de la agencia porque, entiende, un agente no puede sacarle el dinero de las cuentas a sus clientes sin su consentimiento. La hipótesis del fiscal es que GYT manoteó los dineros de sus clientes bursátiles para intentar tapar los agujeros que se le habían disparado en el negocio cerealero.

La novedad es que el abogado de GYT, Sebastián Capucci, solicitó al juez que lleva el concurso una medida cautelar para que le levante la suspensión provisoria que le dictó la CNV. En un escrito de 21 páginas, justificó el pedido asegurando que la agencia debe volver a operar para generar el giro comercial necesario para afrontar sus deudas. 

Y puso sobre la mesa una propuesta de un "nuevo método de trabajo" para convencer al juez. En síntesis, propone que, vía la Justicia, la CNV la habilite a ser un Agente de Negociación (AN) que sólo opere el dinero de sus clientes siendo una tercera empresa (Rosario Valores, propiedad del MAV y la Bolsa de Rosario) la que cobre y pague.

En definitiva, ellos no tocarían la plata quedando todo lo referente a la liquidación y compensación en Rosario Valores. Antes, GYT tenía una categoría mayor a AN, llamada en la jerga Alyc, que le permitía a ellos hacer todas las tareas (operar, cobrar y pagar) que ahora busca desdoblar.

"Rosario Valores será quien tendrá el control jurídico y/o la custodia de los activos que sean operados por los comitentes de Guardati Torti S.A. En muchos casos también la custodia estará a cargo de Caja de Valores SA en las operaciones sobre títulos, obligaciones negociables y acciones, la cual es una entidad absolutamente independiente tanto de la concursada como de Rosario Valores", señala el abogado de GYT.

"Esta forma de operar garantiza que los activos de los comitentes no se incorporen al patrimonio de la concursada y que tampoco tenga un control material o jurídico sobre los fondos o activos que operaren los comitentes (dicha actividad estaría a cargo de Rosario Valores), conforme el método de trabajo propuesto solo intervendría en la faz de negociación y solo con la modalidad de instrucciones expresas", agrega Capucci.

Según reconstruyó Rosario3, la Justicia consultó a Rosario Valores sobre el "método de trabajo" y desde la entidad fueron claros al responder que "cualquier relación con un agente debe estar precedida de autorizaciones administrativas y comerciales emitidas por CNV y por los mercados". Y fue así que dijo que antes de tomar una decisión, GYT "debe obtener las conformidades correspondientes a CNV".

Y cuando la Justicia consultó al organismo de controlar, sus abogados Rodolfo Aulman, María Evangelina Cid y Gonzalo Soroeta, respondieron con un escrito de 32 páginas en las que rechazan de manera terminante que se le puede otorgar una cautelar que le permita a GYT volver a operar en el mercado de capitales.

"La suspensión preventiva tuvo por objeto el resguardo del público inversor, con motivo de la identificación de circunstancias pasibles de constituir incumplimientos vinculados a su actuación en el Mercado de Capitales como ALYC, y motivada, fundamentalmente, en el incumplimiento por parte de GUARDATI TORTI S.A. en la devolución de los fondos líquidos a sus clientes", recuerda sobre los motivos de la suspensión transitoria inicial que decretó CNV.

En concreto, sobre la estrategia de puentear a CNV para lograr una autorización vía judicial, la CNV advierte que "la suspensión cautelar requerida vulneraría la integridad y aplicación de una ley sancionada de conformidad con las previsiones constitucionales de la república, de carácter federal como es la Ley N° 26.831 que es la que le da a CNV el rol de controlado del mercado".

"En conclusión, la concesión de la medida cautelar solicitada agraviaría no solo a nuestra mandante, por cuanto desconocería las competencias que le fueron atribuidas por una ley federal, sino también al público inversor, que quedaría desprotegido frente a conductas -como las del caso- que se pretenden evitar", agregó. 

"Una resolución cautelar en contrario, priorizaría el interés de una persona jurídica por sobre el interés general que le confiara la ciudadanía a un poder de la Nación, como lo es el Poder Legislativo, que fue quien dotó de las facultades y atribuciones a nuestra mandante", resalta la presentación de la comisión.

"Tanto la solicitud de revisión como la petición de suspensión de los efectos de la medida provisoria impuesta por nuestra mandante, así como la evaluación de la propuesta de funcionamiento para operar en el mercado de capitales ensayada por la concursada, deberían haber sido cursadas ante la CNV, todo lo cual ha sido intencionalmente omitido por los concursados", resalta el órgano de control. "La medida preventiva cuyos efectos se pretenden suspender, versa sobre cuestiones estrictamente vinculadas con normas de orden público, vinculadas con la regulación vigente en materia de mercado capitales, encontrándose en juego el correcto funcionamiento del mercado y los derechos y garantías que le son propias a los ahorristas", insiste la autoridad estatal.


La CNV también dedica varias páginas al "nuevo método de trabajo" que propone GYT. Primero aclara que la suspensión provisoria dictada "alcanza a la totalidad de las categorías de inscripción en las cuales se encuentra registrada la empresa", por lo que no avala su cambio propuesto de ALYC por AN. "No resultaría correcto interpretar que el Agente se encuentra solamente suspendido para desarrollar las funciones establecidas específicamente para la categoría de ALYC, sino que la suspensión lo inhabilita a desarrollar cualquier actividad", dice.

Y sobre la propuesta de operar pero cobrar y pagar por un tercero, que sería Rosario Valores, es contundente al decir que "la propuesta de operatoria a desarrollar descripta por el Agente en el escrito en responde, resulta a todo evento improcedente".

Para la CNV, "los saldos acreedores reclamados por los comitentes bursátiles no tienen origen o fundamento en una relación comercial habitual y propia de la relación proveedor/cliente, sino que se fundamentan en la relación contractual de “mandato” y/o “intermediación”- propia de los intermediarios financieros-, pero cuyo origen se basa en la confianza de los comitentes/clientes y el deber de fiducia de quien administra y resguarda activos de terceros, los cuales no forman parte del patrimonio del intermediario. En suma, se destaca que el marco contractual descripto no implica que los comitentes bursátiles otorguen crédito a los Agentes en virtud de la relación de servicios, sino que se trata de una situación sobreviniente al cuestionado accionar del Agente en el marco de su rol de Agente registrado ante la CNV y otras actividades económicas".

Con todos esos argumentos en la mano, finalmente el órgano regulador del mercado sostuvo que "corresponde sostener la medida preventiva adoptada oportunamente por esta CNV respecto del Agente en cuestión, declarando la inadmisibilidad de la pretensión cautelar y el rechazo del “método de trabajo” por ellos propuestos por resultar harto improcedente".