Gimnasia de Mendoza se convirtió en el primer equipo del año en ascender a la primera división del fútbol argentino y desde el próximo campeonato habrá tres equipos de la provincia cuyana en la máxima categoría.
El Lobo hizo historia al derrotar por 3 a 0 en los penales a Deportivo Madryn, luego de igualar 1 a 1 en el tiempo reglamentario y el alargue, y se quedó con el primer ascenso.
En el estadio Ciudad Vicente López, la figura del arquero César Rigamonti se agigantó con dos penales atajados que coronaron una campaña brillante del Blanquinegro en la Primera Nacional.
Partido vibrante
En la primera mitad, Gimnasia fue más ambicioso y convirtió en dos oportunidades, pero el VAR le anuló ambos goles por mano. Deportivo Madryn, más replegado, apostó a la solidez defensiva y al juego desde afuera del área.
En el complemento llegaron las emociones, ya que a los 32 minutos, Luis “el Tanque” Silba puso en ventaja al conjunto chubutense con un cabezazo inatajable que desató la ilusión de todo Puerto Madryn.
Pero cuando el festejo aurinegro parecía encaminado al ascenso histórico, una mano en el área a los 48 minutos derivó en penal para Gimnasia. Fue Facundo Lencioni, el mejor del partido, el que cambió penal por gol con una definición perfecta al ángulo que decretó el 1 a 1 y forzó el tiempo extra.
Durante los 30 minutos suplementarios, el desgaste físico fue notorio y fue Gimnasia mantuvo la iniciativa, aunque el arquero aurinegro, Yair Bonnin se lució con una atajada espectacular ante un remate de Nicolás Servetto que pudo ser el 2 a 1.
En la tanda de penales, la figura de Rigamonti emergió como el gran héroe. El arquero de Gimnasia contuvo los disparos de Federico Recalde y Nicolás Maná, mientras que Luciano Cingolani, Lencioni y Matías Recalde no fallaron y sellaron el triunfo por 3 a 0.
Tres mendocinos en la élite
Con este ascenso, Gimnasia y Esgrima de Mendoza se une a Godoy Cruz e Independiente Rivadavia como los tres representantes mendocinos en la Primera División, algo inédito en la historia del fútbol argentino.
El equipo de Ariel Broggi, que finalizó primero en la Zona B durante el torneo, coronó con justicia una temporada en la que mostró regularidad, compromiso y solidez colectiva.
Del otro lado, Deportivo Madryn se quedó con la desazón de haber estado a minutos de hacer historia. El conjunto dirigido por Leandro Gracián dejó una gran imagen, pero deberá enfocarse ahora en el Reducido en busca del segundo ascenso.