El ex ministro de Economía durante el alfonsinismo Juan Vital Sourrouille falleció este miércoles a los 80 años, confirmaron autoridades de la Unión Cívica Radical.
Sourrouille ocupó el cargo de ministro de Economía de Raúl Alfonsín desde febrero de 1985 a marzo de 1989. Fue el impulsor del denominado Plan Austral que intentó frenar la escalada inflacionaria que marcó la segunda mitad del gobierno radical.
El fallecimiento fue confirmado por Agustín Campero, vicepresidente de la Convención Nacional de la UCR, a través de su cuenta de Twitter.
En tanto, desde la cuenta de Twitter de la UCR enviaron sus condolencias a la familia del fallecido ex ministro.
"Lamentamos profundamente el fallecimiento de Juan Vital Sourrouille, ex ministro de Economía de Raúl Alfonsín. Transmitimos nuestras condolencias a sus familiares y seres queridos", expresaron.
El economista estaba próximo a cumplir los 81 años. Nació el 13 de agosto de 1940, en Buenos Aires. Fue en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires donde se recibió como Contador Público Nacional.
Su llegada al primer gobierno democrático posdictadura se dio en 1983, como secretario de Planificación, y el 19 de febrero de 1985, tras la renuncia del ministro Bernando Grinspun, ocupó esa cartera.
Alejado de la función pública, se volcó a la vida académica y fueron pocas sus apariciones para hablar de su paso por el gobierno de Alfonsín.
Una de las últimas entrevistas que se recuerdan es la que hizo con el portal de análisis político y económico escenariosalternativos.org, de Jesús Rodríguez, en el que recordó: “¿Por qué el Gobierno hace el Plan Austral? En ese momento, el riesgo de que el Presidente no pudiera sostener su mandato no era menor. Fue una operación política para despejar las acechanzas más duras que enfrentaba en ese momento, para llegar a fin de año”.
“Lo conocí a Raúl Alfonsín antes de que se convirtiera en presidente. Fue una sorpresa que a pocos días de su triunfo electoral me llamase para convocarme para la secretaría de la Planificación. Así se inició mi período en el Gobierno. Tengo un gran recuerdo de Bernardo Grinspun, su compromiso con la democracia y con el radicalismo era enternecedor”, había contado en esa entrevista, en 2009.
“Ya para 1988 la gestión económica era vista, sin lugar a dudas, como la pata floja del Gobierno. El Plan Primavera fue una idea para preparar una situación de convivencia razonable para la elección presidencial. La idea de que un Gobierno puede introducir un cambio fundamental en su política económica en el último año de su gestión yo no la comparto, no puede ser exitosa, es un movimiento desesperado”, agregó entonces.