La economía argentina cerró el segundo trimestre de 2025 con un déficit de USD 3.016 millones en la cuenta corriente de la balanza de pagos, lo que marcó un escenario opuesto al registrado el año pasado, cuando para el mismo período se registraba un superávit de USD 3.732 millones.
Según datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) este lunes, el déficit del período junio-agosto de este año se explicó principalmente por el saldo negativo en el ingreso primario (USD 4.080 millones) y en la balanza de servicios (USD 3.483 millones).
Estos números fueron parcialmente compensados por un superávit en el comercio de bienes de USD 2.668 millones y por un ingreso secundario positivo de USD 879 millones.
Dentro del ingreso primario, la renta de la inversión mostró un déficit de USD 4.055 millones, casi USD 1.040 millones más de saldo negativo que en el mismo trimestre del año pasado.
El ingreso secundario, en tanto, mejoró en la comparación interanual al sumar USD 80 millones adicionales. El Indec también constató que la cuenta de capital registró un saldo positivo de USD 162 millones.
Sin embargo, como resultado global, el endeudamiento neto de la economía alcanzó los USD 2.854 millones. En el segundo trimestre de 2024, el saldo había sido positivo por USD 3.787.
También se registró un aumento de USD 14.271 millones en las reservas internacionales del Banco Central, explicado por desembolsos de organismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), la emisión de pasivos a largo plazo y la ampliación de operaciones de financiamiento con “siete bancos internacionales”, indicó el organismo estadístico en su informe.
Récord de deuda externa
Argentina registró a finales del segundo trimestre de este año una deuda externa bruta récord de 305.043 millones de dólares a valor nominal.
El “stock” de deuda externa bruta total con títulos de deuda a valor nominal subió, de acuerdo con la información publicada por el Indec, en 23.783 millones de dólares con relación al trimestre anterior, y en 18.162 millones de dólares con respecto al mismo período de 2024.
Ese ajuste se explica, principalmente, por la suba del endeudamiento estatal equivalente a 18.480 millones de dólares como consecuencia de los préstamos recibidos por el FMI y otros organismos multilaterales de crédito.
La deuda externa bruta con organismos internacionales asciende así a USD 92.964 millones. Casi el 60% corresponde a obligaciones con el FMI, mientras que el 30% restante corresponde casi en su totalidad a préstamos del BID, el BIRF y el CAF.
A su vez, la deuda de las sociedades no financieras y de hogares se incrementó durante el segundo trimestre en USD 2.435 millones. La del Banco Central, por su parte, creció en USD 2.380 millones y la de las sociedades captadoras de depósitos en USD 559 millones.
De esta manera, los datos oficiales muestran que el nivel de endeudamiento bruto a valor nominal registrado a finales de junio pasado es el más alto en las series históricas del Indec, iniciadas en 1994.
En lo que va del Gobierno de Javier Milei, que comenzó en diciembre de 2023, la deuda externa bruta de Argentina a valor nominal creció en 19.092 millones de dólares.