Quince integrantes de una banda narco local que manejaba grandes volúmenes de dinero y utilizaba vehículos de alta gama a modo de “garantía” para conseguir material estupefaciente fueron condenados este martes al término de un juicio oral por delitos relacionados con el tráfico de drogas. Las penas van de los 15 hasta los 3 años, indicaron fuentes de la Justicia Federal.

El principal condenado es un hombre de 32 años llamado Leandro Ezequiel Burgos, quien fue detenido en julio de 2018 en la zona noroeste al mando de un Audi A3 en cuyo interior había 40 mil dólares y una pistola. Semanas después de esa detención la Justicia Federal ordenó 32 allanamientos que dieron por desbaratada a la banda culminaron con el secuestro de 8 kilos de marihuana, 7 de cocaína y varias planchas de LSD.

Burgos fue condenado por el Tribunal Oral Federal (TOF) N°3 bajo la figura de “financista de tráfico de estupefacientes” a la pena de 15 años de prisión. El otro hombre de peso en la causa es Maximiliano Reynoso, domiciliado en barrio Las Flores.

Para la acusación del Ministerio Público Fiscal (MPF), Reynoso era quién organizaba el comercio de estupefacientes y conseguía dinero por intermedio de Burgos para pagar el material estupefaciente. Por ello, Reynoso recibió una condena a 10 años como organizador de tráfico de estupefacientes.

Burgos, según el MPF, tenía distintos puntos de venta a su cargo, entre ellos, el de Tarragona 1144 bis, conocido como el “búnker del medio”, que era administrado por su madre, Ramona Figueroa, también condenada en la causa a 7 años de prisión por comercio organizado de estupefacientes.

Burgos ya había sido detenido en 2015 en ese búnker de barrio Emaús, en el marco de una causa en el que otro transero de peso del noroeste, Gustavo Armando "El tuerto" Cárdenas, terminó condenado a 9 años en abril de 2019. Burgos, considerado el heredero de Cárdenas había recibido 5 años en ese expediente anterior.

Según la investigación, Burgos se valía de un hombre llamado David Cocuzza para abastecer esa boca de expendio.

Cocuzza fue declarado en rebeldía porque estuvo ausente en el juicio. El fiscal Federico Reynares Solari, representante del MPF, había solicitado ocho años de prisión.

Mientras que José Martín Almaraz era el nexo de Reynoso para conseguir el material estupefaciente, que a su vez era provisto por Daniel Alarcón. Tanto Almaraz como Alarcón recibieron una pena de 10 años.

La causa es uno de los tantos desprendimientos que aportaron las líneas telefónicas intervenidas en la conocida como Los Patrones, que se le siguió a la banda Los Monos. Esa megacausa comenzó en 2015 en el Juzgado Federal N° 4 de Rosario y en diciembre de 2018 llegó al juicio oral que concluyó con 34 condenas y cinco absoluciones.

De acuerdo con lo expuesto en el juicio, la organización de Burgos manejaba un nivel de circulación económica muy importante, diversos puntos de venta y de acopio. Además invertía en vehículos de alta gama.

En la causa consta que Burgos aportó en “garantía” una BMW X6 para conseguir material estupefaciente, vehículo que le dejó a Reynoso por intermedio de una persona que se encuentra prófuga.

Después Reynoso le avisó a Almaraz para que la retire. Almaraz la retiró y se la llevó a su domicilio en Funes, a la espera del proveedor Alarcón, quien arribó luego, de acuerdo con actividades documentadas por la Policía Federal Argentina a partir de las escuchas directas, señaló el MPF.

Burgos cayó detenido el 16 de julio de 2018 al mando de un Audi A3 que intentó eludir un control policial en Provincias Unidades y La República. Los agentes policiales secuestraron una pistola 9 milímetros y 40 mil dólares.

Para ese momento, Burgos ya se encontraba en la mira de la Justicia Federal y su detención apuró una tanda de allanamientos por parte de la Delegación Antidrogas de la Policía Federal (PFA).

Las medidas fueron el 4 de agosto cuando la PFA allanó puntos de venta de droga, de acopio y de fraccionamiento en Pasaje Dalia al 6600; Ruta 9 kilómetro 320 a la altura del 1200 en Funes; Bielsa al 7000; Tierra del Fuego y Esquel de Granadero Baigorria; Viamonte al 3300; Nuevo Camino a Soldini al 3800; Las Flores al 3200; Madre Cabrini al 2700; Piedras al 1800 y Padre Giaconne al 1800.

Según la justicia Federal de esos allanamientos fueron secuestraron 8 kilos de marihuana; 7.3 kilos de cocaína, cuatro planchas con un total de 2235 dosis de LSD y distintos elementos destinados al fraccionamiento de estupefacientes. En tanto, en Mosconi al 1600 de Funes, la PFA secuestró balanzas de precisión, una máquina para prensado de envoltorios, una máscara de gas, creatina –sustancia utilizada para estirar cocaína–, y “muchísimas” bolsas de nylon de diferentes medidas.

De las conversaciones que se reprodujeron en el juicio, del mismo día de la detención de Burgos, entre Reynoso y una persona prófuga, quedó claro que esos 40 mil dólares eran producto del comercio de estupefacientes: “Perdió, lo prendieron. Lo agarraron con el auto, tenía la plata, tenía pistola, tenía de todo, hace como media hora. Provincias Unidas y La República. Encima tenía la plata para hacer los pagos, todo, lo prendieron con eso, con dólar”.

Las penas dictadas por el Tribunal integrado por los jueces Osvaldo Facciano, Eugenio Martínez y Otmar Paulucci alcanzaron también a Griselda Torres, condenada a 6 años y 6 meses por comercio organizado de estupefacientes, al igual que Giuliana Olivetto.

En tanto, como partícipes secundarios fueron condenadas a tres años de prisión condicional Raúl Torres Lencina, Silvia Benítez, Enrique Rond, Mónica Córdoba, Ángela Candia, Carlos Olmedo y Carina Romani.