El “no hay plata” que impone el gobierno nacional como filosofía económica tiene, en materia aeroportuaria, sus matices. Para las aeroestaciones que son administradas por entes estatales provinciales, como las de Rosario y Sauce Viejo, efectivamente no hay partida alguna en materia de obras. Pero a las concesionadas al grupo Aeropuertos Argentina 2000 sí se envían recursos provenientes de un fideicomiso que se creó para financiar a todo el sistema. Así lo revela un informe de la Fundación Apertura, firmado por su presidente, Cristian Bergmann, a partir de un pedido de acceso a la información pública sobre lo actuado durante los años 2024 y 2025.

Rosario es una prueba palpable de esta realidad: actualmente el aeropuerto Islas Malvinas se encuentra cerrado por la remodelación de su pista. Esos trabajos se iban a financiar en partes iguales entre Provincia y Nación, pero la segunda se retiró y el gobierno santafesino deberá hacerse cargo del costo total del proyecto, imprescindible para garantizar "conectividad y seguridad", sostienen desde la administración Pullaro. 

El sistema de aeropuertos y el fideicomiso

 

El Sistema Nacional de Aeropuertos (SNA) reúne 57 terminales en todo el país. Las mismas se dividen en dos grandes categorías:

-El Grupo A, así se lo denomina, lo integran las estaciones concesionadas a Aeropuertos Argentina 2000: 35 aeropuertos, incluidos Aeroparque y Ezeiza.

-El Grupo B, que son las administradas por entes provinciales o locales: 22 en total, entre ellos Rosario, Ushuaia, El Calafate, Neuquén y Bahía Blanca.

Para sostener obras en todo el sistema, en 2007 se creó el Fideicomiso para el Fortalecimiento del Sistema Nacional de Aeropuertos, que obliga al concesionario a aportar el 15% de sus ingresos brutos. La normativa, sostiene el informe de la Fundación Apertura, es clara: esos fondos deben beneficiar a todos los aeropuertos, no solo a los concesionados.

“Mediante el mecanismo referido se pretende que los aeropuertos integrantes de la concesión sostengan el desarrollo de aquellos que se encuentran fuera del Grupo A, con el objeto de permitir un crecimiento sistémico de todos los aeropuertos del Sistema Nacional de Aeropuertos”, argumenta al respecto un documento del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) que cita Bergmann.

El presidente de la Fundación Apertura entiende que “hay una oportunidad para generar un esquema de distribución para que los fondos destinados a infraestructura lleguen a todos los aeropuertos que conforman el sistema nacional”


 

Qué pasó en 2024 y 2025

 

De acuerdo a la información oficial obtenida por la Fundación Apertura, en 2024 el fideicomiso recaudó unos 149,5 millones de dólares, de los cuales quedaron 78,3 millones líquidos para obras.

Para 2024 y 2025 se presupuestaron inversiones por 211,8 millones de dólares en 13 aeropuertos. Hasta ahora se ejecutaron 71,8 millones. El ciento por ciento de esos fondos se aplicaron en aeropuertos concesionados.

Entre las obras en marcha con aportes del fideicomiso se destacan:

-San Juan: nueva terminal, avance del 90%, con $11 mil millones de presupuesto.

-Salta: remodelación y ampliación, avance del 33%, con $97 mil millones de presupuesto.

-Formosa: nueva terminal, avance del 42%, con $30,8 mil millones de presupuesto.

-Resistencia (Chaco): remodelación de terminal, avance del 8%, con $28,9 mil millones de presupuesto.

-Aeroparque (Caba): nuevas plataformas, con inversiones que superan los $14,7 mil millones.

-Ezeiza: instalaciones eléctricas nuevas por $7,3 mil millones.

-Tucumán: se construirá una nueva terminal de pasajeros del Aeropuerto de Tucumán, a un costo de 58 millones de dólares.

“Así como Tucumán merece una nueva terminal que implica una inversión de 58 millones de dólares financiados por el Orsna, Rosario viene invirtiendo hace tres gestiones de gobierno provincial, con fondos de todos los santafesinos, alrededor de 30 millones de dólares para su nueva terminal. Sin duda hay que dar la discusión de quién pone el dinero”, afirma Bergmann.

Aeropuertos Argentina 2000, empresa a cargo de las estaciones concesionadas, pertenece a la Corporación América, que encabeza Eduardo Eurnekian, y de la que el presidente Javier Milei fue empleado, al igual que el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.

Sin embargo, el informe de la Fundación Apertura aclara que el aeropuerto de Rosario desde 2016, cuando se remodeló parte de la pista, no recibe financiamiento del Orsna para obras. 

Rosario, caso testigo

 

El aeropuerto de Fisherton es un ejemplo claro de esta desigualdad. Pese a estar entre las terminales de mayor movimiento del interior, no accedió a fondos nacionales en los últimos años. “Es algo que viene de mucho antes que este gobierno”, advirtió Bergmann

La nueva terminal con mangas se construye con financiamiento provincial, con una inversión superior a 30 millones de dólares.

La obra de reconstrucción de la pista iba a tener financiamiento mixto, pero tras la caída de la licitación nacional, el gobierno provincial decidió asumir el costo completo, cercano a 36.500 millones de pesos.

“Nación se borró y decidimos hacerlo nosotros”, se quejó al respecto el gobernador Maximiliano Pullaro.

Desde el 20 de septiembre hasta fines de diciembre, el aeropuerto permanecerá cerrado por los trabajos en la pista.

“De los 20 aeropuertos con más tráfico de pasajeros durante 2024, el 35% son administrados por provincias. Sin embargo, no se destinó un solo peso a ninguno de ellos”, lamenta Bergmann.

Que hizo además un llamado a “los actores económicos de Rosario y la región, porque la relevancia del tema amerita un trabajo conjunto con dirigentes de todo el arco político y que tenga como objetivo la defensa del federalismo. Sabemos de las dificultades macroeconómicas y la importancia de mantener el equilibrio fiscal, pero Rosario es la segunda ciudad del país y debe recibir lo que merece. El aeropuerto local no escapa a esta lógica”.