Dylan Gissi es un jugador "transnacional". Porque nació en Suiza de padres argentinos, por lo que habla español, francés y entiende italiano. Debutó en la primera de nuestro país, pero vistió la casaca de la sub 21 helvética. Su padre fue futbolista y tiene un hermano (Kevin), tan alto como él, que juega en Rampla Juniors de Uruguay... y de delantero. Una historia atrapante.

El defensor, de 1,92 que fichará en estas horas Rosario Central como refuerzo llegado en condición de libre, tiene 25 años de edad. Nació el 27 de noviembre de 1991 en Ginebra porque su padre, Oscar, estaba jugando en el CS Chenois. Y empezó a dar los primeros pasos con la pelota en las inferiores de varios equipos de aquel país.

Su papá se retiró en 1998 con la camiseta del Chenois y automáticamente se transformó en entrenador. Se quedó dirigiendo allá en varios conjuntos (Meyrin, Grand Lancy y hasta la selección helvética sub 16) y Dylan se fue transformando lentamente en futbolista profesional. Pero nunca perdió el lazo con el país natal de su padre.

Tan es así que a mediados de la década pasada pasó fugazmente por Quilmes y Arsenal de Sarandí, pero decidió volver a Europa solo y fichó por la filial del Atlético Madrid. En 2009, su papá Oscar es contratado por Estudiantes de La Plata (jugó en la temporada 88-89, un año antes de marcharse a Suiza) y Dylan lo acompañó en la aventura, él como jugador.

Gissi en Estudiantes
Gissi en el Pincha.



"Mi papá trabajaba en las Inferiores de Estudiantes, yo en ese momento estaba en España, jugando en el Atlético de Madrid. Me vine de vacaciones y como conocía al coordinador de las Inferiores, pedí permiso para entrenarme. Después se dio todo muy rápido, hubo un interés por parte de ellos y Alejandro Sabella dio el visto bueno para quedarme", le contó alguna vez a la página Goal.com.

La selección suiza 

Con la casaca pincharrata disputó once partidos. Y por esos días, recibió un llamado de las selecciones juveniles suizas: "Yo alternaba. Un día me llamó el técnico de la Sub 21 a mi casa en Buenos Aires y me preguntó si tenía ganas de ir y jugar, y obviamente le dije que sí,defender los colores de una Selección es muy importante".

"Me pidió material, tenía los videos de dos partidos de verano que había jugado, se los mandé y a la semana me volvió a citar. Como la Sub 21 no tenía un partido en lo inmediato, jugué para la Sub 20 contra Portugal. Por suerte anduve bien, me quedé contento con mi actuación y al tiempo me volvió a llamar para citarme y jugar en un partido de clasificación a la Euro Sub 21”, comentó.

Olimpo, Montpellier y... Central



Olimpo de Bahía Blanca compró su ficha en 2013. Con esa casaca, se destacó marcando tres goles en catorce partidos, uno de ellos a Central. Así, fue el primer suizo en marcar un gol en la historia del fútbol argentino. De ese paso, le guarda gran afecto a Walter Perazzo, el DT que le dio la confianza para ser titular.

En 2014, entró en conflicto con los bahienses, no se presentó a entrenar y se marchó en calidad de libre al Montpellier de Francia. "Le dije que es un desagradecido. No vamos a comprar a un jugador que no quiere estar acá. Tampoco es maldini", tiró enojado Alfredo Dagna, presidente aurinegro.

En ese equipo, sólo participó de dos cotejos, uno por la Liga y otro por la Copa de Francia. Su última vez oficial con esa camiseta fue el 8 de mayo (7-0 al Aurillac, fue titular e hizo el quinto gol a los 43 minutos de juego). Desde ahí, jugó en Reserva. Hasta que recibió el llamado de Coudet.