Para el Tata Martino es otro dolor de cabeza pensando en el segundo partido de eliminatorias ante Paraguay, pero la ausencia de Ezequiel Garay en el choque de este martes en Asunción está más que justificado y tiene un emocionante motivo. El defensor rosarino tuvo que viajar a Estados Unidos junto su bella mujer porque allí nació su pequeña hija, que llegó a este mundo después de una larga lucha de la pareja.

Garay, que fue titular el jueves frente a Ecuador, tuvo que viajar a Estados Unidos por una cuestión legal, ya se trató de un nacimiento a través de vientre alquilado. La legislación estadounidense obliga a los dos padres a estar en el lugar del nacimiento.

“Ya estamos juntos mi vida, después de tantos años buscándote por fin te encontré”, escribió el jugador surgido en Newell’s en la red social Twitter.

La esposa de Ezequiel, Tamara Gorro, también publicó un emotivo mensaje: “Ya estamos unidas de por vida, hija mía. Todo salió estupendo familia, Shaila tiene la fuerza de sus papás”.

Tamara y Ezequiel tuvieron dificultades para concebir un hijo y después de muchos años de lucha y espera decidieron inclinarse por el sistema de vientre alquilado, que este lunes terminó de manera feliz con la llegada de la pequeña Shaila.