1-Alejandro Lanari: “Excelente arquero. Alejandro en su primera etapa en Rosario Central, supo bancarse ser suplente de Fossati. No bajó los brazos, acompañó al equipo hasta que le llegó la titularidad y no salió más. Con Lanari fuimos compañeros en Central y Tigres, fue un gran profesional y es una gran persona”.

2-Alfio “Coco” Basile: “El gran maestro. El Coco con 37 años agarró Racing de Córdoba y a los jóvenes de aquel plantel finalista del Nacional del 80’, nos metió en la cabeza que en la cancha éramos once contra once y nos convenció que no éramos menos que nadie. Basile fue uno de los mejores entrenadores que tuve en mi carrera”.

3-Carlos Bilardo: “No coincido con el gusto futbolístico de Bilardo. Fue un DT campeón y subcampeón del mundo pero no era de mi agrado su forma de trabajar. Bilardo me dirigió en el Torneo Esperanzas de Toulon, en aquel seleccionado juvenil, jugaba en el mediocampo junto al Tata Martino. Cuando terminó el torneo, antes de regresar a la Argentina, Carlos nos dijo al Tata y a mí que nos iba a volver a convocar. Nos miramos con Martino, no hizo falta decir nada, sabíamos que no volvíamos más. No encajábamos en el sistema de juego de Bilardo, nosotros no corríamos, jugábamos al futbol. Bilardo siempre prefirió jugadores tácticos antes que inventivos”.

4-Hernán Díaz: “Un ganador a morir. Hernán era un futbolista con mucha entrega física, siempre jugó al límite. En Central, gracias a él, que pasó a jugar de cuatro por la lesión de Di Leo, empecé a jugar de ocho, no salí más y fuimos campeones”.

5-Roberto Saporiti: “Un tipo derecho y cabal. Roberto fue el entrenador que más me conoció como futbolista. Me llevó a Talleres y a Junior de Barranquilla, en los dos clubes me dejó muchísimas enseñanzas futbolísticas y personales. Gran DT y muy buena persona el Sapo”.

6-Edgardo Bauza: “Un tipo bárbaro. Con el Patón primero fuimos compañeros en Junior de Barranquilla, después juntos nos vinimos a Rosario Central y conseguimos el título. Me pone muy triste el problema de salud que está atravesando, me duele mucho que una persona tan estudiosa y tan entregada a su profesión como Bauza, no pueda disfrutar todo lo que cosechó. Es muy lamentable todo lo que está viviendo el Patón”.

7-Luis “Araña” Amuchástegui: “Un wing extraordinario y un gran definidor. Luis fue con el jugador que mejor me entendí adentro de una cancha. Nadie sabe… ni nosotros lo sabemos cómo se dio esa conexión entre los dos. Nunca jugamos juntos en inferiores pero nos entendíamos de memoria, Amuchástegui sabía dónde le iba a tirar la pelota y yo sabía dónde él iba a correr. El Araña fue un jugador que tenía todo para jugar en los mejores clubes del mundo, pero solo lo pudo demostrar en River, dónde lo consideran uno de los mejores wines de la historia del club”. 

8-Silvio Carrario: “Terrible goleador… con sangre fría adentro del área. Con el Tweety fuimos compañeros en Talleres, el venía de jugar en Central Córdoba y de ser cajero en un supermercado en Bell Ville y yo venía de Monterrey con 37 años. Me peleaba mucho con él, me calentaba porque entrenaba siempre con fiaca, ni estiraba al finalizar los entrenamientos. Trataba de hacerle entender que si no esforzaba iba a volver al supermercado. Por suerte, lo entendió y llegó hasta dónde llegó en su carrera como futbolista. Con el Tweety hoy vamos al mismo kinesiólogo, seguramente Carrario está tratando de enderezarse los pies (risas)”.

9-Juan Antonio Pizzi: “Un león. Pizzi debutó ante River en el año 1988, se peleaban para pegarle entre el Tano Gutiérrez y Ruggeri, Juan no se achicó, los chocó y los terminó golpeando él a ellos. Era bravo en serio Juan Antonio”.

10-Omar Arnaldo Palma: “¡Un genio el Negro! Omar era un líder positivo, un jugador bárbaro, con un gran panorama de juego de frente al arco rival, muy rápido con la pelota en los pies y una pegada maravillosa. A Palma lo sufrí con Racing de Córdoba y lo disfruté en Rosario Central. En mis primeros partidos en Central, Omar era el enganche titular y a mí Don Ángel al principio no me ponía. Para tratar de insertarme, me puso de nueve y no la toqué (risas). Volví al banco hasta que se lesionó Di Leo, Hernán Díaz pasó de cuatro, Palma no quiso jugar de ocho, entonces le dije a Don Ángel que no se hiciera problema, de ocho y con la camiseta 8 iba a jugar yo y que Palma siguiera jugando de diez, con la camiseta 10. No salí más, nos divertimos con Omar, estuvimos 14 fechas sin perder y salimos campeones. Con el Negro, en dónde nos costó ponernos de acuerdo fue con los tiros libres, fue una lucha tremenda mano a mano con él para definir quien los pateaba. Los dos teníamos fama de buenos pateadores, al principio lo engañé, le dije yo paso y vos pateas, corrí hacia la pelota, nunca pasé y le pegué, se quedó mirándome con una bronca bárbara. Se la hice unas cuantas veces hasta que se avivó, me la empezó hacer él a mí… no pasaba nunca Omar (risas). Fue siempre una competencia sana con el mejor jugador que compartí un mediocampo”.

11-Hugo Galloni: “Un jugador completo. Hugo jugaba, corría, tenía una zurda exquisita, tenía muy buen juego aéreo y le pegaba muy bien a la pelota. En el futbol argentino, Galloni fue uno de los primeros famosos “ventiladores” como le decían en aquellos tiempos al cuarto volante que se sumaba en la mitad de la cancha. El primero fue el Nene Commisso”.