Juan Carlos Pendino es médico terapista del hospital Centenario e integrante de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (Sati), como sus colegas, está preocupado por el aumento de casos, la falta de personal y sobre todo, de compromiso social. Se pronunció a favor de mayores restricciones.

“Estamos en tiempo de descuento, perdiendo por goleada y con pocos jugadores”, advirtió, con analogía futbolera, sobre la situación límite en la que trabajan las terapias intensivas de todo el país.

En contacto con el programa A diario, que conduce Alberto Lotuf por Radio 2, señaló sobre la falta de personal calificado para trabajar con pacientes críticos, el verdadero problema, más allá de las camas físicas.

“No hemos tenido tiempo de formar la gente que se necesita con la capacidad e idoneidad para hacer este trabajo y los pacientes no esperan”, dijo. Opinó a favor de mayores restricciones: cierre de escuelas y mayor control sobre las reuniones sociales.

Para graficar la alarma, señaló que la terapia intensiva del Centenario, donde él trabaja, “está al tope”. “No alcanzan los médicos, ni las enfermeras ni los kinesiólogos”, enumeró.