El fiscal Miguel Moreno, a cargo de la Unidad de Delitos Económicos, convocó para este mediodía a los abogados querellantes en el caso de las múltiples estafas económicas imputadas al reconocido financista Luis Herrera, cuyo default en 2021 sacudió al mercado local.
“La presencia de todos/as ustedes resulta de suma importancia, dado que en dicha oportunidad se tratará la posibilidad de aplicación de una salida alternativa al juicio”, señalo el fiscal en la convocatoria para el encuentro que se realizará a las 12.45 en el Centro de Justicia Penal.
La idea de Moreno es describir el escenario actual de la causa y la solución que entiende sería la más beneficiosa para las múltiples víctimas. En concreto, pondrá en consideración de los querellantes la posibilidad de llegar a un juicio abreviado, un acuerdo que no está cerrado ni mucho menos con la defensa del financista, pero que podría empezar a tomar forma si tiene el aval de los querellantes.
Por definición, en un acuerdo de estas características, el acusado se reconoce culpable (evitando así todo el tiempo y trabajo que significa un juicio) y a cambio de ese reconocimiento obtiene una menor pena. Más allá del acuerdo entre las partes, el entendimiento debe ser luego homologado por la Justicia.
En el caso de Herrera, según averiguó Rosario3, se puso en consideración la complejidad de la causa, el tiempo que ya se insumió Investigando y el que demandará seguir con las pesquisas y la ausencia del dinero que se les sustrajo a las víctimas, como factores que apuntalan la posibilidad de un “abreviado”.
De lograrse el acuerdo, Herrera, quien está preso de manera preventiva desde diciembre pasado (con sus dos hijos, quienes participaban del negocio financiero), admitiría su culpabilidad, pero -trascendió- de ninguna manera quedaría libre y pasará años en prisión por más que le reduzcan su condena. Es más, como tiene cientos de denuncias, es factible que el alivio venga por la libertad de sus hijos.
Igual, es fundamental aclarar, que es una negociación que ni cerca está de ser cerrada. Todo lo contrario. Es una instancia que el fiscal Moreno está poniendo a consideración de recorrer, con lo que no hay que esperar definiciones rápidas y deberá pasar mucha agua bajo el puente.
Ahora, de concretarse la condena, la acción del fiscal Moreno y su equipo marcaría un hito en la historia judicial porque sería la primera vez que un reconocido empresario, que fue importante referente del establishment financiero regional y uno de los hombres más ricos de la ciudad, quede tras las rejas por un crimen económico.
Con respecto a las víctimas, la posibilidad de recuperar algo de lo perdido dependerá del proceso de liquidación de activos tras la quiebra que se le dictó recientemente en Tribunales. En concreto, el pasivo reclamado por 703 acreedores asciende a 63.879.532 dólares; 133.368 euros y 408.598.356 pesos. Pero el problema es que la Sindicatura, comandada por los contadores Giandomenico, Clausen Bossio y Cortes solo aconsejaron al juez Villanueva, quien lleva el concurso, que se verifiquen $26.992.555.967. Esto es: menos de la mitad de la que los acreedores pidieron en la justicia.



