La Organización Mundial de la Salud (OMS) ponderó los resultados positivos preliminares de las vacunas contra el coronavirus de las empresas Moderna y Pfizer, pero advirtió que deben esperarse los datos finales y el seguimiento de los efectos adversos en los pacientes una vez que concluyan los ensayos clínicos.

“Estamos muy felices de escuchar sobre estas buenas noticias, pero hay muchas otras vacunas candidatas que entregarán resultados antes de que termine el año y comienzos del próximo, y algunas serán más fáciles de distribuir a nivel de los países y otras más complicadas”, aseguró la doctora Mariangela Simao, experta en vacunas y tratamientos, en una conferencia de prensa, reportó la agencia de noticias de la ONU.

La especialista agregó que “el panorama es bastante prometedor y tener a dos candidatas con más del 90% de efectividad es muy esperanzador, pero hay muchos desafíos en la implementación todavía”.

En tanto, la científica jefa de la OMS, Soumiya Suaminathan, expresó que los desarrolladores deben realizar un seguimiento de, al menos, dos meses a los pacientes que recibieron la vacuna una vez termine el ensayo clínico para evaluar los posibles efectos secundarios.

“Hay interrogantes que quedan todavía sobre cuánto dura la protección que proveen, el impacto sobre la enfermedad severa en diferentes poblaciones como los ancianos, así como reacciones adversas después de ciertos periodos de tiempo, así que esperamos que los ensayos clínicos sigan recogiendo datos”, dijo.

Suaminathan explicó que existen consideraciones de seguridad y eficacia, pero también asuntos prácticos como la cadena de frío y el número de dosis requeridas que tomará en cuenta el mecanismo Covax a la hora de hacer contratos con los desarrolladores.

“Seguimos optimistas y nos gustaría trabajar con todos los desarrolladores y fabricantes en la iniciativa Covax para asegurarnos de tener la mayor cantidad de opciones posibles, porque algunas vacunas serán más adecuadas para ciertas situaciones o grupos de personas, y otras tendrán condiciones especiales para su almacenamiento y distribución”, afirmó.

La científica agregó que es claro que en la primera mitad de 2021 habrá dosis muy limitadas, y muchas de las compañías ya realizaron pactos bilaterales con algunos países.

“Nuestro objetivo es que podamos tener suficiente en nuestro mecanismo para los más vulnerables, como los trabajadores de salud que están siendo desproporcionalmente afectados por la pandemia. Queremos que estén protegidos sin importar de qué país vengan. Esto requiere solidaridad global”, expresó.

El experto de la OMS, Edward Kelly, dijo durante la conferencia de prensa que el mundo no debe olvidar que, aunque la vacuna se implemente en el futuro, las medidas de salud pública tienen que seguirse aplicando.

“La última semana tuvimos 60.000 muertes y 4 millones de casos nuevos, y nos quedan muchas semanas más antes de que la vacuna esté disponible. No es la vacuna que salva a las personas, es la vacunación, y nos queda mucho por trabajar en la distribución”, aseguró.

En tanto, la doctora experta en inmunización, Kate O’Brien, manifestó que hay "una gran cantidad de vacunas que están disponibles, como la del sarampión que tiene más del 95% de eficacia, y aun así todavía tenemos brotes de esta enfermedad”.

La OMS pidió a los países que se preparen, ya que la mayoría de ellos no tienen programas para llegar a toda la población adulta.

En tanto, el director de emergencias, Michael Ryan, sostuvo que es "un momento de gran esperanza", pero que se debe "tener esperanza con actitud, con determinación, planes, inversión, financiación, implementación para estar listos para entregar la vacuna a todos aquellos que se van a beneficiar de ella y hacerlo con equidad”.

El director de la OMS, Tedros Adhanom Gebreyesus, pidió que se haga todo lo posible para proteger a los trabajadores de salud y recalcó que, pese a las buenas noticias sobre las vacunas, se encuentra muy preocupado por el aumento de casos que se está viendo en algunos países.

Tedros advirtió hoy que solamente una vacuna no alcanzará para derrotar a la pandemia del coronavirus ya que "va a completar las demás herramientas que tenemos, no a reemplazarlas".

El director de la OMS volvió a participar de la reunión del consejo ejecutivo de la agencia, luego de haberse puesto en cuarentena el 2 de noviembre, por haber estado en contacto con una persona diagnosticada positivo en coronavirus.

"Inicialmente las cantidades serán limitadas, y por consiguiente el personal sanitario, las personas de edad y las que tienen mayor riesgo tendrán la prioridad" serán las primeras en ser vacunadas y "esperamos que ello reduzca el número de muertos y permita resistir a los sistemas de salud", dijo.

Alertó que “ello dejará aún mucho espacio al virus para operar", a la vez que exhortó a no abandonar las medidas que impiden la propagación del virus, como los tests, las cuarentenas o respetar las medidas de prevención sanitarias.

Además, se declaró a favor de establecer un "sistema mundial para compartir agentes patógenos y muestras clínicas para facilitar el desarrollo rápido" de tratamientos, vacunas y otras terapias, que serían dispuestas como "bienes públicos mundiales".