Un tornado provocó la muerte de al menos tres personas en Carolina del Norte, en Estados Unidos, mientras una ola de frío polar continúa golpeando al resto del país, informaron hoy las autoridades locales.

"En este momento hay tres víctimas mortales confirmadas y 10 heridos", señalaron en un comunicado los servicios de emergencia del condado de Brunswick, el más afectado por un tornado que se generó en la zona durante las últimas horas del lunes.

"Al menos 50 viviendas se vieron afectadas en el incidente y varias líneas eléctricas resultaron dañadas, provocando cortes de luz", detalla el comunicado. 

Arboles derribados, casas aplastadas y automóviles destrozados pudieron verse en las imágenes difundidas por los medios locales.

Tras los destrozos, el sheriff John Ingram reconoció en una rueda de prensa que "habrá un largo proceso de recuperación" y aseguró: "Esto es algo que no he visto nunca", según señaló AFP.

Histórica ola polar


El tornado ocurrió mientras el resto del país atraviesa una fuente ola de frío polar que llega desde el Ártico y está provocando temperaturas mínimas que superan las marcas históricas.

Las condiciones climáticas adversas ya provocaron la muerte de al menos diez personas y afectaron a regiones que no están acostumbradas a la nieve. 

Las tormentas invernales afectaron a regiones que no están acostumbradas a las bajas temperaturas. 

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) informó este martes que una nueva tormenta invernal se estaba originando en las denominadas Llanuras del Sur, una región que abarca Texas Oklahoma y Kansas.

Se trata de un "área extensa y sin precedentes de condiciones invernales peligrosas", describió el NWS anticipando que podrían registrarse mínimos históricos, dejando a más de 150 millones de estadounidenses bajo algún tipo de alerta de clima invernal.

El Servicio Meteorológico Nacional emitió distintos tipos de alerta que afectan a más de 150 millones de estadounidenses. 

Frente a la posibilidad de que se desate una nueva tormenta en la región de los Grande Lagos (noroeste), el gobernador de Nueva York Andrew Cuomo ordenó a los servicios de emergencia que estén listos para hacer frente a la "nieve, hielo y fuertes vientos en todo el estado durante los próximos dos días". 

Por su parte, el gobernador de Kentucky Andrew Beshear aseguró: "No sobrevivimos a casi un año de pandemia para perder gente a causa de una tormenta de nieve o de hielo". 

Texas, uno de los estados más acostumbrado a las altas temperaturas, fue uno de los más afectados por esta histórica ola polar. 

En Austin, capital de ese estado, un espeso manto de nieve cubre calles, árboles y coches y las temperaturas llegaron hasta los 18 grados bajo cero este fin de semana.

Los habitantes de las ciudades texanas se mantienen encerrados en sus casas, en un estado donde las temperaturas promedio habitualmente rondan los 20 grados.

Las intensas nevadas dejaron autos atascados. 

A causa de las fuertes nevadas, las heladas y las medidas para evitar la sobrecarga de la red, casi 2,8 millones de hogares en Texas se quedaron sin electricidad el lunes, según el sitio Poweroutage.us.

En tanto, la ola polar amenaza con extenderse más al sur y el NWS advirtió que "se esperan tormentas eléctricas severas, lluvias intensas y temperaturas cálidas en el sur de Georgia y Florida".