En el marco de una protesta convocada por las redes sociales e impulsada por un sector de la oposición bajo el hashtag #12O, manifestantes se concentraron este lunes feriado por la tarde en el Obelisco y en otros puntos de la ciudad de Buenos Aires, epicentro de la manifestación, para rechazar políticas públicas impulsadas por el Gobierno.

En automóviles o a pie, y con variadas consignas escritas en carteles que emulaban banderas argentinas, los manifestantes preparaban una gran suelta de globos "biodegradables", según contó una de las organizadoras.

"Todos somos Rosenkrantz", decía uno de los carteles visibles en las inmediaciones del Obelisco, en alusión al presidente de la Corte Suprema.

Otra pancarta, que postulaba el "NO" a la reforma judicial, era sostenida por una mujer que refirió que "la libertad está en manos de la Justicia" y que, por eso, había que "defenderla" y resistir la iniciativa de modificar el fuero federal impulsada por el Gobierno.

En tanto, el cruce de las avenidas 9 de Julio y Corrientes era paulatinamente ocupado por vehículos, todos ostentando en los techos y parabrisas banderas argentinas.

Algunos de los manifestantes se mostraban sin barbijos, pese a que tanto autoridades porteñas como nacionales pidieron tomar recaudos ante los riesgos de contagio en el marco de la pandemia de coronavirus.

"Seguimos en pandemia, no tenemos vacuna, y, por eso, si bien manifestarse es un derecho, les pedimos a quienes lo hagan que sea con cuidado", aseguró a la mañana el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, en diálogo con radio La Red.

De igual forma, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, consideró que, "más allá de que uno puede presentar los reclamos que le parezca, en el contexto sanitario de circulación comunitaria del virus, es evidente que marchar es un riesgo que se debería evitar".

En Olivos y frente a la casa de Cristina

 

En tanto, cantos a favor y en contra del Gobierno, algunas corridas e insultos tuvieron lugar este lunes frente a la puerta principal de la quinta presidencial de Olivos, donde confluyeron agrupaciones políticas, sindicales y sociales que apoyan al presidente Alberto Fernández y manifestantes encuadrados en la marcha opositora convocada a través de las redes sociales.

En un primer momento sólo se encontraban en el lugar dirigentes del Partido del Trabajo y la Equidad (ParTE), del Espacio político AIRES-Caba y de distintas agrupaciones políticas, sindicales y sociales de las localidades de Hurlingham, Malvinas Argentinas y La Matanza, quienes convocaron a "todos los argentinos que desean que al Gobierno le vaya bien, a estar unidos".

Poco antes de las 17 fueron llegando manifestantes contrarios a las políticas aplicadas por el Gobierno y el cuerpo de Infantería de la Policía debió interceder para que cada grupo antagónico permaneciera en lugares diferenciados, sin contacto, en las inmediaciones de la quinta de Olivos.

Además, otros grupos opositores al gobierno se manifestaron frente a la casa de la vicepresidenta Cristina Kirchner, lo que generó el repudio de buena parte del arco político y del propio presidente Alberto Fernández.