Con mucho dolor, el pueblo de Berabevú despidió este lunes a la tarde los restos de Julieta Del Pino, la joven de 19 años víctima de femicidio.

La tristeza, la congoja y el reclamo de justicia volvieron a recorrer las calles de la localidad del sur santafesino, ubicada a unos 160 kilómetros de Rosario.

Los restos de la joven fueron despedidos por los habitantes del pueblo entre la iglesia y la plaza central, muy cerca del lugar donde Julieta trabajaba.

A muy pocos pasos del quiosco de donde salió el viernes a la noche para no poder regresar a su casa donde la esperaba la familia.


El presidente comunal fue el encargado de organizar la despedida pública de la chica luego de un cortejo fúnebre que había partido un poco antes de la sala velatorio donde la despidieron con mucho dolor sus seres queridos y familiares más cercanos.

Luego, frente a la plaza de Berabevú el cura párroco dio una oración y los vecinos y vecinas acompañaron a los familiares de Julieta y dieron el último adiós a la joven.

El cuerpo de Julieta Del Pino fue regresado a Berabevú este lunes al mediodía luego de la la autopsia en Venado Tuerto.