Los disturbios y choques con la Policía en Francia, de más de tres días, genera cada vez más revuelo en el ámbito mundial. Todo comenzó por un caso de "gatillo fácil" contra un adolescente de 17 años y hasta el momento hay más de 600 personas detenidas. Este viernes por la noche, los saqueos se repitieron en París y al menos 100 personas con el rostro cubierto se llevaron todo del centro comercial Les Halles.

La ola de protestas surgió como respuesta a la muerte de Naël tras recibir anteanoche un disparo policial por supuestamente desobedecer sus órdenes durante un control de tránsito. El Gobierno desplegó 40 mil agentes y dispuso el toque de queda, informó Télam.

Según el ministerio, 249 policías y gendarmes resultaron heridos, ninguno de ellos de gravedad. El medio local Le Parisien informó que algunos de estos disturbios tuvieron lugar en la plaza Nelson Mandela, donde un grupo de manifestantes lanzó proyectiles contra la policía y varios vehículos fueron incendiados. Las fuerzas del orden respondieron con gases lacrimógenos y porras, a fin de dispersar a la multitud.

No obstante, por tercer día consecutivo, las calles de París y Nanterre, en las afueras de la capital, se llenaron de manifestantes que protestaron en una marcha -inicialmente pacífica- que devino en enfrentamientos con las fuerzas del orden y la tensión se elevó al máximo en la zona, reflejaron medios parisinos como Le Monde y Le Figaro.

Los enfrentamientos también se registraron en el barrio Pablo Piccaso, donde la multitud se ha atrincherado con cócteles molotov en una zona ajardinada del parque André Malraux.

La muerte de Naël se produjo el martes por la mañana cuando dos agentes motorizados lo persiguieron tras haber cometido varias infracciones al código de la circulación al volante de un vehículo de alquiler que conducía sin tener la licencia.

Cuando consiguieron detenerlo al quedar inmovilizado en un atasco, los agentes lo apuntaron con sus armas y le exigieron que apagara en motor. Pero en lugar de eso, el joven aceleró y fue entonces cuando uno de los dos policías le disparó en el pecho. Inicialmente, el policía afirmó que había utilizado su arma porque Nahel amenazaba su integridad y la de su compañero al poner en movimiento el vehículo, pero las imágenes grabadas por testigos de la escena han puesto en evidencia que esa versión no se sostenía.

La gente protestando por la muerte de Nael.