Las estafas electrónicas "subieron un 3.000%" desde el comienzo de la pandemia, y la mayor cantidad de ellas ocurre "a través de las redes sociales", afirmó Gabriela Abad, abogada especializada en derecho del consumidor y miembro de la asociación Usuarios y Consumidores Unidos.

"Con la pandemia y el encierro, todos nos volcamos a los medios electrónicos, pero lamentablemente las personas comenzaron a ser víctimas de estafas y engaños", dijo Abad en diálogo con Radio Concepto.

Estas estafas se basan en lo que la especialista denominó "manipulación psicológica", explicando que consisten en apelar a "ciertas situaciones especiales que uno está esperando como consumidores o que nos interesa, la respuesta a un reclamo, un subsidio, o ahora el tema de la vacuna", ejemplificó.

En este sentido, detalló que los estafadores buscan pretextos para ponerse en contacto con las personas, apuntando "a la inmediatez y a un consumidor que está en un situación de vulnerabilidad" para obtener información personal bancaria.

Estafas por redes sociales


Abad explicó que "ante la imposibilidad de comunicarse telefónicamente con el banco", los usuarios "escriben por las redes sociales, y es ahí cuando ese comentario que se hace público" se convierte en una oportunidad para el delincuente informático, quien "se contacta de manera privada por desde un perfil falso en el que se hace pasar por el banco". 

Las redes sociales implican riesgos y los usuarios pueden ser víctimas de estafas.

"Hay que tener mucho cuidado con las redes sociales, si bien en muchos casos nos pueden servir ya que sabemos el impacto que pueden tener en las empresas los comentarios negativos", alertó la especialista.

Frente a otros de los canales utilizados, como mails falsos o los llamados telefónicos, Abad advirtió que "nunca hay que dar datos sensibles" como el código Token que permiten a los estafadores acceder a las cuentas bancarias.

"Muchas veces la gente no sabe qué es el código Token, que es un segundo mecanismo de seguridad para confirmar operaciones y puede llegar por mensaje de texto o por la misma aplicación del celular y no hay que darlo", apuntó.

Las víctimas de este tipo de estafas, explicó Abad, deben "hacer la denuncia en la policía o la fiscalía", el reclamo ante el banco y también con defensa al consumidor. "En algunos casos tienen suerte y el banco lo soluciona, en otros, la cuestión se complejiza y hay que avanzar judicialmente", detalló.