El módulo espacial de la NASA InSight, que desde hace meses analiza el interior de Marte, ya tiene los primeros resultados: el planeta rojo tiene actividad sísmica y un campo magnético mayor de lo esperado.

Hasta ahora, las misiones a Marte habían capturado imágenes de la superficie y estudiado aspectos de la superficie, pero nunca habían indagado en su interior, hasta que llegó InSight con el objetivo de examinar la estructura y composición del segundo planeta más pequeño del Sistema Solar después de Mercurio, según estudios recientes publicados en Nature Geoscience y Nature Communications.

El 26 de noviembre de 2018, el módulo amartizó en Homestead Hollow, un pequeño cráter situado en la Planicie del Elíseo, y ahí mismo comenzó a perforar el interior del planeta (hasta cinco metros de profundidad) para averiguar, entre otras cosas, por qué Marte perdió su atmósfera y los océanos que albergó miles de años atrás.

Una serie de estudios difundidos dan cuenta de los primeros meses de trabajo del módulo y, además de confirmar que el planeta rojo es sísmicamente activo, revelan datos sobre su interior, su atmósfera, su campo magnético y su geología, informó EFE.