El Concejo comenzará a discutir en las próximas semanas una iniciativa para regular el uso comercial y recreativo del río Paraná frente a la ciudad de Rosario. El proyecto busca establecer un marco normativo para las distintas actividades acuáticas que se realizan sobre el río y también crear una tasa para mantener y mejorar los accesos.

En los argumentos del proyecto, que es autoría de la concejala Marina Magnani, se sostiene que en los últimos años hubo un mayor acceso de la sociedad a las actividades que se desarrollan en el río. Este crecimiento se tradujo también en un mayor parque náutico local que actualmente cuenta con unas 15 mil embarcaciones y 11 mil kayaks y piraguas.

Ante esto, se propone formar unConsejo consultivo de regulación de la actividad náutica”. El mismo será responsable de crear las reglas de uso del río, tanto para el tránsito de buques de carga y lanchas de transporte de pasajeros, como para la actividad deportiva ya sea kitesurf, windsurf, wakeboard, kayaks o piraguas, entre otros.

Con respecto a las bajadas públicas existentes, el proyecto habla de que actualmente hay “diversos accesos a las vías navegables a lo largo de toda la ribera de la ciudad. Pero que los mismos no están regulados por lo que se encuentran en mal estado, con infraestructura precaria y sin condiciones de ser utilizadas”.

Para mejorar esto, la propuesta de Magnani es establecer cuatro bajadas públicas en la ciudad ubicadas en el Paseo del Caminante, el estacionamiento de Costa Alta, al lado del club Náutico y la restante en la zona de El Mangrullo.

La construcción, mejora y mantenimiento de estos accesos públicos al Paraná se financiará con una “Tasa por mantenimiento de los accesos a las vías navegables y limpieza de la ribera”. 

Esta tasa se determinará por la valuación obrante en el registro provincial de Embarcaciones deportivas o de recreación de Santa Fe que actualmente se utiliza para el cálculo del impuesto de la Patente Única sobre Embarcaciones. 

Con respecto a quiénes deberán abonar esta tasa, serán todas las embarcaciones que se utilicen sobre el Paraná frente a la ciudad de Rosario. De todos modos. establece una diferenciación entre las que se encuentran en clubes, guarderías o talleres navales que deberán abonar un canon mensual y las que se guarden en otro lugar y se utilicen de modo eventual. En estos últimos casos, sus titulares deberán abonar un importe cada vez que utilicen alguna de las bajadas.