Con la crisis económica, Rosario tiene otra vez ferias de trueque, donde mucha gente se concentra para ofrecer o buscar bienes y servicios que son casi siempre la única moneda de cambio.

Este mes se reinstaló con fuerza la feria de Villa Manuelita, en Centeno y Circunvalación (zona de Uriburu y el río), tres días a la semana, con alta demanda de alimentos a bajo precio y ofertas de hasta cortes de pelo.

Juan Cruz Caramún, uno de los organizadores, dijo en Radio 2 que allí ya son 789 feriantes los que se instalan cada miércoles (de 12 a 16), sábado y domingo (de 10 a 16) y todo el tiempo “se acerca gente para sumarse”.

Si bien lo que más se encuentra es indumentaria usada, entre la que se mezcla también calzado, muchos ofrecen alimentos a bajo precio y es lo que más sale.

“Siempre hay ropa, abrigo, calzado, cosas que a alguien le quedó chico o no la usa más. Pero lo que más busca la gente hoy es puré de tomates, azúcar, yerba, fideos, arroz. Es lo primero que van a buscar”, señaló Caramún.

En ese sentido, dijo que entre las “normas de convivencia” establecidas en la feria “no se pueden vender elementos que brinda el Estado” a modo de asistencia.

“Muchos mayoristas se sumaron con su puesto y venden mercadería al costo de mayorista”, agregó el promotor del trueque en ese espacio cercano al Puerto de Rosario y con vista al Paraná.

Entre las ofertas, detalló, se encuentran varios servicios como por ejemplo de “albañil, electricista y hasta un peluquero” que en los últimos días cortaba el pelo por $2.000 o a cambio de “yerba, azúcar, aceite” o una campera talle XL, según detalló en su cartel.