Martín Cirio (“La Faraona”) fue tendencia estos días en Twitter luego de un fuerte cruce con el cantante de cumbia El Dipy en el que el youtuber e influencer terminó acusado por pedofilia a raíz de unos viejos tuits. Después de bajar el perfil un poco, Martín Cirio volvió con un extenso descargo en el que pidió disculpas por aquellos tuits “nefastos” pero aclaró que era parte de un personaje y que fue sacado de contexto. Prometió “no desaparecer” ni quedarse callado.

Martín Cirio publicó su descargo –“¿Quién es Martín Cirio?”, un video de media hora aproximadamente– este lunes por la noche en su canal de YouTube, donde suele subir su material de humor. El influencer de 36 años dijo que es “un pelotudo” por haber publicado esos tuits, pero también aseguró que lo quieren “hacer desaparecer” porque en el último tiempo militó causas incómodas para muchos.

 “Quiero arrancar diciendo que me equivoqué, la pifié feo con El Dipy. Él había subido una vez un tuit en el que me bardeaba y dije «me la diste una vez, ahora te la voy a devolver». Y me salió como el orto porque, además, no estaba bueno hablar de una canción que sacó hace un tiempo. No soy amigo de El Dipy, no sé cómo pensará ahora, pero como todo el mundo se debe haber deconstruido, y las cosas que cantaba hace unos años no tienen nada que ver con lo que piensa ahora. Lo que hice es, básicamente, lo que están haciendo conmigo ahora”, comenzó con su descargo La Faraona.

La polémica había surgido la semana pasado cuando el youtuber criticó El Dipy por una canción que habla sobre la violación en grupo de una adolescente de 15 años. El cantante aclaró que la letra había sido escrita por “el dueño de la banda” El Empuje, a la que él pertenecía y; además, publicó varias capturas de pantalla con repudiables tuits del propio Martín Cirio con comentarios sobre sus supuestas intenciones de abusar de menores que asistían a un jardín de infantes.

El tema se convirtió en hashtags muy duros contra el youtuber, como #MartínCirioPedófilo o #DesaparecéMartínCirio.

“Cuando me desperté y vi las capturas que me mandaron mis amigos no podía creer cómo pude haber escrito algo tan aberrante –dijo Martín Cirio–. Obviamente los escribí yo pero no me reconocía, ni siquiera recordaba haberlos escrito. Yo tuve un proceso de deconstrucción y crecimiento que es muy reciente”.

En tal sentido, contextualizó lo que era Twitter en aquella época: “Estaba lleno de gente de entre 20 y 40 años y se trataba de ser picante, quién decía la mayor aberración, y todos lo festejaban (…) No había fotos de la cara, había personaje. Era el humor del peor, del más repudiable”.

Hoy leo mis tuits y de ninguna forma puede ser gracioso, me da vergüenza, cómo puedo ser tan monstruo de escribir esa mierda, no lo puedo justificar. Ni siquiera creo que fue humor porque no era gracioso. Era ser picante por ser picante. Pero no dejaba de ser un personaje. Repudiable y lo que quieran, pero un personaje”, enfatizó y advirtió: “Juzgar eso como si fuese la realidad y decir «uy, me descubrieron, soy un pedófilo», es una locura. Es como agarrar un tuit de Micky Vainilla (el personaje de Peter Capusotto caracterizado como un nazi) y juzgarlo como si fuese Capusotto. Agarrar eso y ponerlo en un plano real es una locura. Las redes se mueven con un lenguaje propio que si lo sacás de ese contexto por supuesto que es un escándalo y no tiene sentido”.

 “A mí me pueden matar, cancelar, decir Martín Cirio pedófilo pero puedo seguir haciendo videos. Con esto que se generó lograron dejarme sin laburo, porque todo lo que podía llegar a hacer se me cayó. Pero va a volver porque lo voy a dar vuelta. No voy a desaparecer ni quedarme callado. Voy a seguir denunciando las cosas que me están pasando. Por más que me refloten tuits de mierda y me quieran hacer quedar como un pedófilo van a tener que matarme para hacerme callar la boca”, aseguró.