La ilusión de los mamíferos, publicada por Random House, es la nueva novela del escritor argentino Julián López, también autor de Una muchacha muy bella y en libro de poemas Bienamado,

Ambientada en Buenos Aires, la trama retrata la historia de amor entre dos hombres que se encuentran los domingos en un pequeño departamento de la ciudad de Buenos Aires; un goce perecedero y transitorio que se repite cada semana.

La pérdida, el dolor, el duelo, el deseo, los vínculos, el adentro y el afuera, y la trasformación a partir de un otro se funden en “una prosa finísima y una morosidad de detalles propia de la letanía pero también del poeta”, tal como reseñó en la contratapa del libro la periodista y escritora María Moreno.

 “Venía de Una muchacha muy bella, que funcionó bien (fue publicada en Holanda, Francia y los Estados Unidos) pero que, en algún lugar, me saturó la experiencia de la escritura: no podía escribir. Eso me empezó a angustiar y entonces me impuse una escritura improvisada todos los domingos a la mañana. En un momento, me di cuenta que esos textos pertenecían a un universo común, que tenían que ver con lo epistolar, con alguien que le hablaba a un otro y que claramente era una historia de amor”, explicó Julián López a Télam.

“Lo que yo quería hacer era una novela donde en la primera página el lector tuviera toda la información: una pareja que terminó. Pensaba que eso me iba a facilitar la escritura pero me la complicó mucho más: había que sostener el tono, la dinámica, la vitalidad. Quería trabajar sobre el lenguaje con cierta lírica al servicio de la narrativa”, afirmó el también actor sobre La ilusión.

Y es en la centralidad de la pérdida y la certeza de lo irrepetible, en un “uno” que le habla a un “otro” (que ya no está) que López encuentra la “dinámica” para plasmar una literatura exquisita, profusa en detalles y de pulso único (el autor utiliza la primera y la segunda persona en un registro epistolar).

“Es la aceptación de que eso que se perdió va a ser para siempre; el personaje lo dice: voy a envejecer con un hombre. Es la idea de una experiencia tan fundamental que de alguna manera clausura las demás. Mi gran ilusión era poder escribir una novela de amor y una novela de Buenos Aires”, sostuvo el poeta y novelista, quien citó entre sus influencias a Néstor Sánchez, Marguerite Yourcenar y Julio Cortáza. 


Al ser consultado sobre el modo en que estos dos hombres se encuentran a escondidas, ocultando su atracción, López definió a La ilusión de los mamíferos como “una novela del siglo XX”: “Es algo que me robé a mí mismo y se lo di a mi personaje. Algo que tiene que ver con el extrañamiento de formas que no existen más. Una manera de la intimidad que ahora existe de forma más fragmentada y dispersa, con algo muy interesante que tiene que ver con la no posesión. Yo cuento una historia del siglo pasado. En definitiva, lo más doloroso de esta historia es alguien que extraña el siglo XX. La novela trae esta idea de que un encuentro verdadero es algo tremendamente transformador que se interpone con tu proyecto original, algo que viene a descompensar. De alguna manera, es una historia de amor eterna, porque el personaje decide quedarse con eso: el encuentro lo deja en otro lugar de sí mismo para siempre. Aunque me cueste decirlo, hay una idea cristiana en el libro: la muerte, la resurrección, el sacrificio por el otro. Es una celebración amarga pero muy intensa.”