Pocas expresiones públicas pasan desapercibidas ya. Así, lo expuesto el viernes pasado por Guillermo Andino en una entrevista radial, despertó gran polémica en las redes sociales. Cientos de usuarios cuestionaron su anécdota en relación al nacimiento de su primera hija: el periodista reveló que acordó con el obstetra, a espaldas de su esposa, el día del parto a fin de que coincidiera con una fecha emotiva para él: el 4 de noviembre, día que en 1967 el Chango Cárdenas hizo un gol memorable en Montevideo.

Andino fue entrevistado en el programa radial Metro y Medio que Sebastián Wainraich conduce junto a Julieta Pink y Pablo Fábregas en Radio Metro, luego de ser elegido como uno de los conductores del debate presidencial. En ese marco, se refirió a su fanatismo por la colección, tema que derivó en el relato de una historia que él contó con gracia pero que, sin embargo, no cayó nada bien en la comunidad virtual.

“Yo arreglé con el obstetra para ver si podíamos adelantar el parto y que naciera el 4 y él no entendía nada de fútbol pero como tenía un torneo de golf el lunes 6 me dice «Por mí no hay problema, mejor» y adelantamos para el 4”, comenzó el relato, haciendo referencia al 4 de noviembre de 1967, día del histórico gol de Cárdenas desde 35 metros que le dio la copa a Racing y el primer título mundial a la Argentina.

Y continuó: “Entonces lo que pasa es que Caro tuvo un trabajo de parto de 10 horas y yo dije «Uy mamita si metí la pata me mata». Finalmente nació Sofi el 4 de noviembre, el día del gol del Chango en Montevideo pero recién le conté a Caro 8 años después”. Ahí fue cuando Wainraich intervino con un “Noooo”.

Andino siguió entusiasmado: “Osea que nació Vicky y como salió escupida, fue una cosa totalmente distinta, viste, llegamos a la clínica y rápidamente nació. Porque Caro había quedado mal por esta cosita mía de arreglar con el obstetra que le dije «Bueno amor ahora te tengo que contar algo ya que estamos felices y casi me mata. Me dijo no te puedo creer»”. La reacción del conductor fue: “Estás al límite”, a lo que el periodista asintió al tiempo que remarcó: “Pero bueno, los junté al Chango y a Sofi”.

Las reacciones en las redes sociales revelan gran indignación al hecho de que haya tomado tal decisión con un profesional sin contar con la anuencia de la mujer embarazada.