Un policía de San Lorenzo fue acusado de abuso sexual infantil contra una nena, amiga de su hijastra, desde hace un año, cuando ella tenía 13. Este lunes hubo una manifestación por justicia en la ciudad vecina.

Mariana, mamá de la víctima, encabezó la movilización y habló con el móvil de Telenoche Rosario (El Tres), donde explicó que la familia se enteró por boca de la menor, hoy de 14 años, apenas dos semanas atrás, cuando se animó a contarlo.

El pasado 18 de enero, la chica, hoy adolescente, relató lo vivido a su hermana y a su madre, que de inmediato radicó una denuncia pero asegura que dichos trámites tiene una dificultad extra por apuntar contra un policía, acusado de abuso sexual simple sin acceso carnal.

“El fiscal nos dijo que no podían darle la prisión preventiva inmediata porque cuando el abuso ocurrió, no estaba en función de policía”, dijo la mujer, y luego se enfocó en narrar cómo sucedieron los hechos, siempre de acuerdo al testimonio de su hija.

La víctima se decidió a hablar después de una piyamada que organizó su familia en su casa con sus dos mejores amigas, una de las cuales le pidió a los suyos algo que necesitaba y se lo llevó su padrastro, el uniformado apuntado como abusador.

“Se lo trajo este señor y vi que mi hija, al verlo, se quedó quieta, mientras él la miraba fijamente. Cuando él se fue le pregunté a ella si estaba todo bien y me dijo que sí, porque estaban las amigas. Al otro día veíamos una serie que un momento se trató de un abuso y ella dijo que tenía algo para contarnos. Y ella no es de hablar mucho”, detalló Mariana.

Contó que entonces su hija les dijo: “¿Ustedes saben por qué dejé de ir a la casa de mi mejor amiga?”. Y agregó: “Ahí entendimos todo. Y cuando ella paró de llorar nos relató cómo empezaron los hechos y cómo terminó todo: un día estaba en la pileta (en casa de la otra nena), su amiga se fue al baño, llegó este hombre, se metió y le empezó a tirar agua y arrinconar. Ella se sintió incómoda y salió de la pileta”.

“Al otro día a la madrugada –prosiguió la mujer desde la manifestación– él se tenía que ir a trabajar, le tocó el hombro y cuando ella se levantó le puso la mano en el pecho y la empezó a tocar. Quedó paralizada y sin saber qué hacer, mientras su amiga dormía al lado y su madre en la habitación”.

En relación a la pareja del acusado, según Mariana sabía de la situación porque añadió: “Ese mismo día a la tarde la obligaron a ir a bañarse y ella sintió que se abría la puerta a cada rato, pero como estaba el lavarropas en funcionamiento, creyó que estaban tirando ropa. Hasta que escuchó una discusión con la mujer que le decía: 'Hache de pe (por las iniciales de un insulto), es sólo una nena, qué hacés acá'. Se empezaron a pelear y mi nena se asustó, se secó y me llamó para que la fuera a buscar”.

Un verano después, la menor dio un paso clave en contarle a su familia la sucesión de abusos que venía sufriendo por parte de este hombre que si bien aún integra la fuerza de seguridad, fue pasado a disponibilidad mientras la causa avanza con la investigación.

En ese sentido, según informó también Telenoche, desde la Jefatura de San Lorenzo emitieron un comunicado donde confirman que “se dispuso el correspondiente sumario administrativo bajo la figura de disponibilidad del agente policial”, el cual “ha sido separado preventivamente de sus funciones mientras se desarrolla la investigación judicial y no está prestando ningún tipo de función en ninguna oficina policial”.