Un pistolero de 28 años quedó preso por haber atentado a balazos contra dos personas que se encontraban en Vía Honda el fin de semana.

El fiscal Fernando Sosa le atribuyó este lunes haber portado, desde un momento indeterminado, hasta su aprehensión una pistola calibre 9 milímetros sin autorización legal alguna. En la madrugada del sábado 3 de diciembre, aproximadamente a la 1.45, el imputado Kevin Walter Marturana iba como acompañante en una moto y efectuó 9 disparos en inmediaciones de Presidente Quintana entre Manantiales y Avellaneda.

Los tiros hirieron a Liliana (54) en la pierna izquierda. Y a Germán (64), en la pierna derecha.

Personal policial que patrullaba vio a una moto con dos ocupantes a gran velocidad y luego de una persecución que llegó hasta Seguí y Lavalle, los involucrados perdieron el control de la moto Honda Wave, que tenía pedido de captura por robo. Sólo Marturana fue detenido y llevado a audiencia. No se informó secuestro de arma alguna.

La jueza Paula Álvarez tuvo por formalizada la audiencia y dispuso la prisión preventiva por el plazo de ley por el delito de portación de arma de fuego y abuso de arma en concurso real.

Este fue una de los tantos tiroteos que sacudieron la zona de Presidente Quintana y Avellaneda durante varios días en noviembre, según comentaron vecinos. En el lugar es vox populi que funciona un búnker llamado la Cueva, entre otros, donde se juntan consumidores, transeros, soldaditos y vecinos. Las balas, generalmente, no distinguen a nadie.

En la madrugada del 30 de noviembre, balaearon a un hombre indigente de 45 años, José Luis G. alias “Pipi”, quien había sido denunciado por vecinos por robar cables. En la escena quedaron ocho vainas servidas y Pipi quedó internado en el Heca.

En plena tarde del 27 de noviembre, en tanto, otra balacera dejó heridos a Mario (65) y Stella (45), ambos con impactos en piernas.