Un hombre de 77 años fue encontrado asesinado este domingo en su departamento céntrico, donde acudió su hermana con la policía luego de un par de días sin tener respuestas de su parte. El cuerpo presentaba contusiones y se encontraba atado con el cable de una plancha.

El hallazgo fue al mediodía en una casa del 7º piso de un edificio ubicado en Zeballos al 1500. La víctima, que vivía sola y pertenecía una pastoral católica carcelaria que trabajaba con presos, yacía ensangrentada, con golpes en el cráneo y atada al cuello.

La Agencia de Investigación Criminal (AIC, ex PDI) trabajaba en el lugar e identificó al fallecido como Leopoldo Teófilo G. Se constató que el inmueble estaba todo revuelto aunque en principio no se detectó la faltante de pertenencias.

El operativo en el edificio se inició tras el llamado de la hermana del hombre al 911 ante la sospecha de que algo había pasado, ya que habló con él por última vez el pasado viernes y desde entonces no le respondió más llamadas ni mensajes. Tampoco atendió ante el intento de una vecina que se acercó a tocar timbre.

La puerta de la unidad se encontraba cerrada pero sin llave aunque no se estableció aún cómo ingresaron ni cuántos fueron los atacantes. Se revisarán imágenes de al menos cinco cámaras de seguridad privada en la zona, una del interior del edificio.

Además, personal del gabinete científico secuestró una plancha que podría haber sido usada para golpear a la víctima, quien no tenía pareja ni hijos y pertenecía a la pastoral católica del grupo carcelario en las unidades penitenciarias 4 y 5 de Rosario.

Interviene también en el caso la Fiscalía de Homicidios Dolosos a cargo del doctor Ademar Bianchini.