La noche del lunes 21 de noviembre pasado, Yair Natanael R., un barbero de 20 años, recibió cinco tiros en el playón municipal del Encuentro, ubicado en el complejo Fonavi de Rouillón y Seguí. El ataque precedió al intento de homicidio de dos adolescentes que fueron baleados en un maxiquiosco de Seguí y Calchaquí. Y el doble crimen de Valentín Solís (14) y Eric Galli (15), cometido el 24 en la misma zona.
La secuencia puso al rojo el termómetro de la violencia callejera en el oeste, donde también hubo otros ataques en la zona de influencia de los monoblocks. Un lugar “sobrepoblado de transeros” y pibes captados por los circuitos de economía delictiva que generalmente terminan con dos destinos: la cárcel o la muerte.
Según develó el fiscal Adrián Spelta, se sospecha que los autores de estos atentados contra la vida serían parte del grupo que integra Franco Saavedra (20), el imputado el lunes como parte del trío que intentó matar a Dante R. y, por las dudas, terminó con la vida de sus amigos Valentín y Eric. Los homicidas quedaron filmados al escapar del complejo.
Tres días antes tuvo lugar el intento de crimen del peluquero, que también es amigo de Dante R., y pudo sobrevivir los disparos (en extremidades y costado dorsal izquierdo). Pero cuando su salud mejoró, terminó acusado por un hecho de febrero pasado, por el que tenía pedido de captura.
El pasado viernes, desde la camilla del Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), Yair escuchó la acusación del fiscal Carlos Covani por los delitos de violación de domicilio, amenazas calificadas y portación de arma.
El 22 de febrero de 2022, señala la investigación, Yair ingresó junto con Jorge C. a un domicilio de Matienzo al 2500 sin la autorización de propietario efectuó dos disparos y la amenaza: "Te llegó la hora".
La jueza Verónica Lamas González le dictó la prisión preventiva a Yair, que quedó internado todavía convaleciente y con custodia en el Heca.
Según registros de análisis criminal, este joven ya había sido víctima de disparos el 7 de agosto de 2021en Saavedra al 5400, cerca del Fonavi, una cuadra que por esos días fue escenario de balaceras.
Spelta indicó en conferencia de prensa que los homicidas de Galli y Solís serían los mismos atacantes que quisieron matar al barbero. “Este ataque tiene vinculación directa con el del peluquero del lugar y con la tentativa de la noche anterior, hay testigos que señalan a las mismas personas”.
