La discusión sobre la seguridad de nuestros datos y la información que queda expuesta cuando navegamos en internet viene creciendo desde hace tiempo, y la pandemia de coronavirus la impulsó todavía más fundamentalmente por dos cuestiones: la adopción de la virtualidad como respuesta frente a la necesidad de continuar con diferentes actividades (desde la educación hasta el trabajo) y, en ese marco, el incremento de las estafas digitales.

El cibercrimen registrado a nivel global desde que comenzaron las medidas de cuarentena se multiplicó por cuatro, según un informe publicado por el FBI, en el cual también se señala que los ataques de "software malicioso" crecieron alrededor del 30.000 por ciento.

Las denuncias por delitos digitales como estafas o extorsiones, en tanto, aumentaron un 61,12% durante el 2020 en relación con el año anterior, señalan desde la Asociación Argentina de Lucha Contra el Cibercrimen, lo cual generó también más consultas relacionadas con delitos informáticos.

Las denuncias por delitos digitales aumentaron un 61,12% durante el 2020 en relación con el año anterior. (Pexels)

Desde que comenzaron las medidas para restringir la circulación, los hackers que utilizan sus conocimientos con fines delictivos aprovecharon esa necesidad de seguir trabajando, o bien de subirse forzozamente al carro de las compras digitales, para dar con potenciales víctimas de extorsiones, fraudes o robo de datos para suplantación de identidad, los tres delitos cibernéticos más comunes en estos tiempos.

Teniendo en cuenta estos factores, surge la pregunta de cómo podemos navegar de manera más segura por internet. Los expertos en la materia advierten que se trata de una cuestión compleja, ya que realmente es mucha la información que hoy en día compartimos en la web mediante diferentes aplicaciones.

Martín Oettel es especialista y formador en ciberseguridad y creador de Pasando Data, una organización que brinda servicios de consultoría y capacitación en ese ámbito, con la finalidad de fomentar un uso seguro y responsable de la tecnología.

En diálogo con Rosario3, Oettel compartió una serie de conceptos y recomendaciones que resultan útiles para comenzar a tomar noción sobre cómo podemos proteger mejor nuestros datos.

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Lo primero a tener en cuenta es una distinción. "La seguridad y la privacidad no son lo mismo", dice Oettel, y es que la primera está vinculada con la protección contra ciberataques, mientras que la segunda se refiere a la información que compartimos. 

En ese sentido, menciona algunas consideraciones para tener en cuenta cuando navegamos por internet, tales como utilizar siempre sitios confiables y oficiales, evitar la piratería (con la cual corremos el riesgo de descargar archivos modificados que contengan un software malicioso) y mantener siempre actualizados nuestros dispositivos.

Esto último incluye tanto los propios dispositivos como también programas, ya sea el navegador o un antivirus, puesto que las actualizaciones suelen incluir correcciones de fallas de seguridad. Además, los routers también pueden actualizarse para evitar este tipo de problemas y mejorar el rendimiento.

También recomienda tener siempre copias de seguridad de nuestros archivos más importantes, ya sea en dispositivos de almacenamiento externo o bien en la nube, mediante servicios como Google Drive o Dropbox. Aunque para esta segunda opción hace una aclaración.

"Si vamos a cargar algo en la nube, tenemos que cifrar esa información", aconseja. Para el cifrado de archivos, se pueden usar programas como AES Crypt o Vera Crypt.

Navegadores


Entre las diferentes opciones que podemos encontrar disponibles, Chrome resulta el navegador más utilizado actualmente (por alrededor del 65% de los usuarios de internet). Y para el especialista en ciberseguridad, el servicio de Google es "seguro" pero "desde el punto de vista de la privacidad tiene muchos grises".

Esto se debe fundamentalmente al seguimiento de toda nuestra actividad online. "Cuando instalamos Google Chrome, el navegador genera un ID publicitario para hacer un seguimiento de tus búsquedas y direccionar los anuncios", explica.

Navegadores como Brave o Tor ofrecen mayor privacidad para navegar por internet. (Freepik)

Esto puede significar que algunos usuarios prefieran buscar otras opciones, tales como Firefox (de Mozila) o Brave, en los cuales de acuerdo con Oettel "la privacidad forma parte del desarrollo".

Al referirse a la importancia que se le da a estas cuestiones, Oettel indica que "cuesta que la gente lo entienda". Al menos eso identifica en sus charlas y capacitaciones sobre ciberseguridad, en donde al explicar de qué manera podemos cuidar nuestra privacidad en el mundo digital algunos de los asistentes se muestran reacios a estas prácticas.

Si bien es cierto que, desde su punto de vista, los principales navegadores son confiables en términos de seguridad por el hecho de contar con el respaldo de grandes empresas que invierten en el desarrollo de mejoras en ese sentido, en lo que se refiere a privacidad los usuarios podemos tener más control.

Almacenar y probar la seguridad de nuestras contraseñas


Lo primero que destaca Oettel en este sentido está vinculado con las contraseñas, y su consejo es nunca almacenarlas en el propio navegador. Ya sea que estemos usando Chrome o Firefox, la sugerencia de "recordar" las contraseñas para no tener que escribirlas nuevamente aparece siempre que ingresamos en una cuenta, independientemente del sitio.

Pero estos administradores de contraseñas que recuerdan nuestros datos no resultan lo más conveniente, dado que en caso de utilizarlos, cualquier persona que tenga acceso a nuestra computadora podría ingresar fácilmente en nuestras cuentas. Además, la información se almacena en archivos que no resultan muy difíciles de descifrar para ciberdelincuentes que quieran acceder a nuestra información.

Anotar las contraseñas en libretas sigue siendo una buena opción, aunque hoy en día hay gestores digitales que permiten almacenar todas nuestras claves en un solo lugar. (Freepik)

Lo que sí recomienda Oettel es utilizar gestores como Bitwarden, que permiten almacenar las claves de diferentes servicios en un mismo lugar, lo cual también resulta práctico dado que con su uso podemos cumplir con otra de las recomendaciones: utilizar contraseñas diferentes para todo.

Otra herramienta útil es Kaspersky, que realiza una evaluación de nuestra clave y nos indica su nivel de seguridad y, además, arroja una estimación del tiempo que llevaría descifrarla usando una computadora promedio.

Para utilizarla, remarca Oettel, es importante tener la precaución de no escribir nuestras contraseñas reales, sino otras con la misma nomenclatura, es decir idénticas en cuanto a cantidad de letras, números, caracteres y uso de mayúsculas. 

Herramientas útiles para mejorar la seguridad


Teniendo en cuenta que los navegadores cuentan con diversos complementos, el creador de Pasando Data compartió algunos servicios que podemos aprovechar para navegar de forma más segura y cuidar nuestra privacidad en internet. 

  • Authy: se trata de una aplicación que permite habilitar la autenticación de dos pasos (2FA) para una larga lista de páginas y aplicaciones. Este método de seguridad agrega un código adicional además de nuestra contraseña, y el mismo se solicita cuando se inicia sesión en una cuenta.
  • Privacy Badger: este complemento bloquea automáticamente rastreadores de anunciantes y terceros que siguen nuestra actividad en la web sin permiso.
  • Https Everywhere: funciona para encriptar las comunicaciones en determinados sitios que utilizan este protocolo, como Facebook y Twitter.
  • DuckDuckGo: es un motor de búsqueda que protege la privacidad de los usuarios evitando recopilar la información de las búsquedas, arrojando siempre los mismos resultados independientemente de quién la haga.
  • Have i been powned: este sitio permite realizar una búsqueda a partir de nuestro correo electrónico, para identificar si se encuentra dentro de alguna base de datos filtrada. En caso de que así sea, lo recomendable es cambiar la contraseña del email en cuestión.